La inflación de Colombia se aceleró en junio menos de lo que esperaban los economistas, sin embargo, los operadores y analistas de renta fija prevén un panorama de precios sombrío, especialmente para la primera mitad de 2023.
(Vea: Exportaciones: US$22.982,4 millones entre enero y mayo).
La inflación anual aumentó en el sexto mes del 2022 a 9,67 % respecto al año anterior, en comparación con la estimación mediana de 9,73 % de los analistas encuestados por Bloomberg.
Los futuros aumentos internos del precio de los combustibles, una moneda más débil y las expectativas de aumentos salariales agregaran presión para futuras alzas de las tasas de interés después de un incremento de 1,5 puntos porcentuales a 7,5 % en junio.
El peso colombiano cayó a un mínimo histórico el miércoles 6 de julio y las tasas de interés implícitas en el precio de mercado de los swaps descuentan que el Banco de la República elevará la tasa de referencia a 10,4 % en un año.
(Vea: Inflación en junio llegó a 9,67%, el dato más alto en 22 años).
«Nos sigue preocupando la inflación«, dijo Arnoldo Casas, gerente de portafolios de Credicorp Capital.
La segunda mitad del año traerá presiones inflacionarias con precios de gasolina más altos, pero el panorama para 2023 podría ensombrecerse con un traslado del peso más débil hacia los precios y un aumento del salario mínimo que podría estar entre 15 % y 20%, según Casas.
El administrador de activos prevé que los responsables de política monetaria elevarán la tasa de referencia al 9,75 % este 2022.
(Vea: Banco de la República incrementa tasa de interés a 7,5 %).
«De alguna manera, eso ya está incorporado en las tasas de los TES. La subida de tasas de interés no golpeo a los TES y la inflación tampoco«, sostuvo.
Casas estima que los rendimientos de los bonos locales a 10 años aumentarán hasta un 12 %, dependiendo de cómo evolucione el diferencial del riesgo de crédito.
Por su parte, Juan David Ballén, economista de Casa de Bolsa, dijo que las expectativas de inflación internacional podrían disminuir si los precios de las materias primas siguen cayendo, dados los temores de recesión.
Sin embargo, Colombia podría ver más presiones inflacionarias debido a los aumentos esperados en los precios de la gasolina y los aumentos en el salario mínimo del 2023.
(Vea: Las 1.000 empresas más grandes del país representan el 77 % del PIB).
José Luis Hernández, operador de renta fija de Corficolombiana, dijo que aunque la inflación sorprendió a la baja, todavía es demasiado alta y la mayor preocupación está en que los precios sin alimentos ahora están más cerca del 7 %.
Los rendimientos de los bonos locales de Colombia han caído, pero «creemos que eso será efímero«, dado que la liquidez ha sido escasa, y la captación de los bancos están a tasas más altas.
Hernández espera que la curva de bonos en pesos locales «tienda a aplanarse o incluso a invertirse«.
«Si la inflación termina (2022) entre 9 % y 10 %, eso genera presión hacia el año entrante por la indexación de precios«, en cuyo caso se mantendrá alta por más tiempo, dijo.
Y valoró que el escenario base para el Banco de la República es que las tasas de interés aumenten en la reunión de julio 150 puntos básicos, al 9 %.
BLOOMBERG