La Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) dio un paso importante en la ejecución de uno de los proyectos viales más ambiciosos del sur del país. La entidad convocó oficialmente al proceso de licitación pública para la Asociación Público-Privada (APP) del proyecto El Estanquillo – Popayán, una obra que busca mejorar la conectividad y la infraestructura vial en los departamentos del Valle del Cauca, Cauca, Nariño y Putumayo. El proyecto tiene un presupuesto estimado de $7,6 billones y está diseñado para mejorar las condiciones de transporte de carga y pasajeros en esta importante región del país.
El proyecto se desarrollará en dos fases. La fase inicial de preconstrucción tendrá una duración aproximada de 1,5 años, seguida de una fase de construcción de 4,5 años. Una vez adjudicado el contrato de concesión, se dará inicio a la etapa de planificación y diseño detallado de la obra, con la posibilidad de comenzar las intervenciones más pequeñas y menos disruptivas en los primeros meses.
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En cuanto a los plazos, el proceso de licitación sigue su curso con la publicación de los prepliegos en el portal Secop I. A través de esta plataforma, los interesados en participar en la licitación podrán consultar los estudios previos, los anexos técnicos y otros documentos relacionados con el proyecto. También podrán presentar observaciones o solicitar aclaraciones sobre el proceso antes de que se publiquen los pliegos definitivos.
El siguiente paso en el proceso será la publicación de los pliegos definitivos, que se espera que ocurra en el primer semestre de 2025. Posteriormente, se abrirá el proceso de selección para adjudicar la concesión a la firma o consorcio que cumpla con los requisitos establecidos en los pliegos y que se encargará de la construcción, operación y mantenimiento de la vía durante los 20 años que durará la concesión.
El Estanquillo – Popayán
El proyecto se basa en la construcción, rehabilitación y mejoramiento de varios tramos viales en el suroeste colombiano, específicamente entre el municipio de Popayán y el sector de El Estanquillo, en el Valle del Cauca. La obra contempla seis intervenciones que incluyen la rehabilitación de tramos existentes, la mejora de variantes viales y la construcción de nuevas doble calzadas.
A detalle, las obras que se destacan son la construcción de 14 túneles, 116 puentes vehiculares, 12 puentes peatonales y cinco intersecciones nuevas. Además, el proyecto incluye obras geotécnicas para la estabilización de taludes y la intervención de puntos críticos de la vía con el fin de garantizar la seguridad de los usuarios.
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La obra o solo mejorará la conectividad entre los departamentos del suroeste colombiano, sino que también facilitará la comunicación y el comercio con Ecuador.
Se estima que el proyecto beneficiará a más de un millón de personas que transitan por esta zona, reduciendo significativamente los tiempos de desplazamiento en una de las rutas más importantes para el transporte de carga y pasajeros. Según la ANI, esta infraestructura contribuirá a mejorar los indicadores de calidad de vida de las comunidades cercanas, al ofrecer una mayor eficiencia en la movilidad y mejorar el acceso a mercados y servicios.
es el presupuesto estimado para el proyecto.
Se espera que la fase de construcción genere aproximadamente 151.000 empleos directos, indirectos e inducidos, lo que contribuirá a la dinamización de la economía local.
La obra tendrá en cuenta la protección de la biodiversidad del territorio y contempla la implementación de pasos de fauna para permitir el paso seguro de especies en los tramos más sensibles del corredor vial. Asimismo, se incorporarán medidas para mitigar el impacto ambiental a lo largo de todo el proyecto.
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También usará tecnología avanzada para mejorar la seguridad vial en esta región del país. Se implementará un Sistema Inteligente de Control y Apoyo al Tránsito (Sicat), que tiene como objetivo reducir la accidentalidad y mejorar las condiciones de circulación en la vía. Este sistema contará con herramientas como cámaras de monitoreo, sensores de velocidad y otros dispositivos para garantizar un flujo seguro y eficiente de vehículos.
Las nuevas infraestructuras también contarán con mayor señalización y sistemas de control de tráfico para garantizar que los conductores puedan desplazarse con mayor seguridad a lo largo de los tramos intervenidos.
La mejora de la infraestructura vial también permitirá reducir los costos operativos del transporte de mercancías, lo cual es clave para fortalecer la competitividad de la región y el país.
La concesión de 20 años permitirá a la firma o consorcio adjudicatario realizar las inversiones necesarias para la construcción de la infraestructura, su posterior mantenimiento y la operación del corredor vial durante dos décadas.
PAULA GALEANO BALAGUERA
Periodista de Portafolio
