Cuando el disparo detonó en el apartamento de una casa de Funza (Cundinamarca), una joven tuvo la mala fortuna de observar todo lo que pasó sobre las 2:30 de la madrugada de ayer, en hechos que rodearon la muerte de un hombre que recibió un tiro en la cabeza.
Al ver la calamidad, la muchacha llamó a las autoridades municipales e indicó que el joven herido se encontraba tendido en su habitación, ubicada en la Calle 24 con Carrera 2. Las patrullas llegaron al momento y dieron cuenta de la escena. El muchacho, que respondía al nombre de Cristian Camilo Briceño, seguía vivo.
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Una odisea se generó para llevarlo a un hospital y después de pasar por varias atenciones, fue estabilizado y trasladado al Hospital de la Samaritana de Bogotá. De hecho, el muchacho duró luchando por su vida cerca de 12 horas, hasta que sobre las 3 de la tarde perdió la batalla.
Aunque lo ocurrido en aquella casa del barrio México sigue siendo un misterio, las autoridades forenses se encargarán de corroborar las versiones.
Y es que indagando lo sucedido, las autoridades se pusieron en contacto con la muchacha que vivía en el mismo piso del fallecido. Ella, al recordar lo que había visto, dijo que en un momento de la madrugada salió al baño y en medio del recorrido vio que la puerta del cuarto del joven estaba abierta y él se encontraba sentado con la mirada perdida. Tenía un revólver calibre 38 en su mano, el cual alzó a la altura de su cabeza y sin dudar apretó el gatillo.
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