La Cascada Rakachenda, conocida como la cascada del río Angasmayo, se erige en el corregimiento de San Mateo, Puerres, como un impresionante atractivo natural de 120 metros de altura.
Noticias Nariño
La Cascada Rakachenda, ubicada en el corregimiento de San Mateo en el municipio de Puerres, Nariño, es un verdadero tesoro natural que fascina tanto a turistas como a investigadores. Con una imponente altura de 120 metros, esta cascada se forma a partir del río Angasmayo, cuyas aguas nacen en el páramo del cerro Negro y desembocan en la cuenca del río Guaitara.
Los páramos, reconocidos como santuarios sagrados, son fundamentales para la biodiversidad, al sustentar diversas especies de flora y fauna y al proveer agua a las comunidades. La importancia de proteger estos ecosistemas se hace evidente en la vitalidad del río Angasmayo, que, además de su función ecológica, guarda un rico trasfondo cultural. Según Angasmayo, operador turístico local, la tradición oral de los abuelos destaca los secretos y leyendas que envuelven a la cascada, sumergiendo a los visitantes en un mundo de asombro y misterio.
El nombre «Angasmayo», de origen quechua, hace referencia a un río que, según algunas interpretaciones, marcaba el límite norte del Imperio Inca. La localización de este río ha sido objeto de debate, aunque muchos coinciden en situarlo en el actual río Angasmayo, en el sur de Pasto.
La cascada Rakachenda no solo es la más alta de Nariño, sino que también es un lugar mágico que, una vez visitado, deja una profunda huella en quienes la descubren, invitándolos a regresar una y otra vez. Con su imponente caída de agua y su entorno inhóspito, esta maravilla natural se posiciona como un símbolo del patrimonio natural y cultural de la región.
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