Por Juan Pablo Guzmán Pérez
Durante el transcurso de la decimonovena edición del Cartagena Festival de Música, el violinista italiano Alberto Franchin dio a conocer cuál es la clave para que la música clásica sea más conocida por el público general.
En esta oportunidad, el canto del mar se hace presente en la capital del departamento de Bolívar durante los primeros días de 2025. Por lo que Franchin, nacido en la ciudad de Palermo, costa sur italiana, expresó a través de su experiencia, cómo la música clásica puede acercarse a muchas más personas. Tanto en Cartagena, como en otras partes del país.
En primer lugar, la comunicación
Al ser cuestionado sobre este objetivo, el intérprete expresó: “Una de las cosas más importantes, antes del concepto del artista o de alguien más, es la comunicación. La buena y apropiada introducción de las personas a la música es fundamental.”
Esta introducción, la cual se gesta a través de diversas fuentes como la educación o el consumo cultural, refleja una realidad muy diciente: de acuerdo a las cifras, no somos cercanos a estas actividades.
Prueba de ello es la Encuesta de Consumo Cultural hecha por el Departamento Nacional de Estadística (DANE) de 2020. La cual muestra que, por ejemplo, en la Región Caribe, menos del 16% de los encuestados mayores de 12 años asistieron a conciertos, recitales, eventos o presentaciones de música en vivo en los doce meses anteriores a su realización.
A pesar de esta cifra, ella no es la única vía de masificación; no solo de la música clásica, sino también de otros ritmos que marcan la historia de un lugar o de una comunidad. Lo que hace de sus ritmos y melodías, algo presente en el día a día; o, por lo menos, en el vivo recuerdo de uno o varios grupos de personas.
Continúe leyendo: Siniestralidad vial cae 77% en puente festivo 2025 en Colombia
La educación, base del crecimiento de la música clásica
Lograr que el espectro de conocimiento de las personas sea mayor a nivel musical, por supuesto, no solo se consigue a través de la asistencia a un concierto, sino de la siguiente clave que dio a conocer el artista italiano: la educación. Un aspecto que, dentro de las realidades plasmadas en la música clásica, es primordial para entender y ampliar su influencia.
Sobre su aprendizaje, de acuerdo a Franchin, “hay muchas cosas que pueden ser contadas acerca de la historia de cada pieza, de un compositor. De modo que puedes empezar a entender mucho más; regresar a casa y ver muchas cosas aparte de solo escuchar”.
Es así como, en esta edición del Festival, expresa que ha conocido la historia de compositores españoles como Joaquín Turina y Enrique Granados; aparte de Luís de Freitas Blanco, de origen portugués.
“Comienzo a buscar sobre algo de la vida del compositor, qué hicieron en su vida. Eso es importante porque empiezas a entender cuál es el proceso que siguieron para la escritura de sus obras. Puedes cometer errores al momento de interpretar la pieza si no sabes acerca de su vida o de su trabajo previo.”, comenta.
Franchin, quien también se desempeña como profesor en el Conservatorio de Tartini, ubicado en Trieste, hace manifiesta la importancia de la educación a través de su experiencia.
“Por ejemplo, hace unos meses trabajamos con Giovani Bietti, que también está en el Festival y nos enseñó mucho porque le gusta esto. Él puede explicar la música de modo muy simple a personas que probablemente no entiendan mucho de música.”
Si esto es reflejado en la realidad colombiana, es de gran importancia considerar circunstancias como la educación cultural en las instituciones educativas y superiores de sus habitantes; además de su participación en programas de enseñanza ejecutados en centros culturales y casas de la cultura.
Respecto a ello, el DANE indica que, en las cabeceras municipales, solo un 8% de las más de 31.000 personas encuestadas en estos territorios, asistieron a estos sitios.
Si esta cifra se toma en consideración, no solo la educación resulta valiosa en cabeceras municipales y otras entidades de cada uno de los 32 departamentos del país, sino su promoción y fortalecimiento bidireccional. En el que lo académico y lo cultural encuentren puntos de convergencia y equilibrio para el progreso individual y social. De modo que las comunidades transiten – a través de su interés, en primer lugar, y del posible desarrollo de afinidad con este u otros géneros musicales – por el camino que propuso el violinista italiano para un mayor consumo, no de música clásica exclusivamente, sino de actividades culturales.
El Cartagena Festival de Música continúa el día de hoy en su XIX edición con otros dos conciertos, uno de ellos de entrada libre. En primer lugar, ‘Boccherinni y la península ibérica’, a las 4:00 de la tarde en el Palacio de la Proclamación, evento de entrada libre. Y en segundo lugar, ‘De Falla. El amor brujo, una obra genial’, a las 7:00 de la noche en el Teatro Adolfo Mejía.
Para mayor información consulte www.cartagenamusicfestival.com