Ni el más pesimista de los analistas tenía en sus cuentas la caída de 0,3% de la economía colombiana en el tercer trimestre (julio – septiembre) de este año, la primera desde finales de 2020, cuando se contrajo 3,5%. Las proyecciones apuntaban a que habría un leve crecimiento entre el 0,1% y el 0,7%, pero la noticia que dio ayer el Dane cayó como un baldado de agua fría para propios y extraños.
Y no es para menos, la desaceleración económica de Colombia se tornó más fuerte…