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En horas de la madrugada de ayer, el silencio de una de las calles del barrio La Riviera (Engativá) fue interrumpido con el sonar de un arma de fuego. Luego del tremendo susto, que dejó paralizados a los vecinos, salieron a mirar lo ocurrido y se dieron cuenta que un militar había terminado con la vida de un ladrón en un intento de hurto.
“Yo estaba saliendo de la ducha cuando se escucharon las detonaciones, cuando salimos a mirar nos dimos cuenta que un militar había matado a un ladrón que le iba a quitar su cicla”, nos indicó ayer una vecina del lugar.
Fueron por lana y salieron trasquilados
Q’HUBO pudo conocer que alrededor de las 4:30 de la madrugada de ayer, un sargento primero del Ejército, de 40 años, que se movilizaba en su bicicleta por la carrera 111 D con calle 70 G fue abordado por dos delincuentes que pretendían robarle su vehículo.
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“El pillo que falleció le había robado la bicicleta a otra persona unos metros más atrás, dicen que le dejó una bicicleta más pequeña y se le llevó la de él. Luego se cruzó con el militar para robarle la bici, pero se topó con la muerte”, añadió un residente del sector.
Los pillos, con armas traumáticas, se le acercaron a la víctima, pero para poderlo despojar de su bicicleta le accionaron el arma traumática. Cuentan allí que, obviamente, los ladrones no contaban con que el militar desenfundaría su arma de fuego para defenderse.
“Se dieron bala de lado y lado, cuando yo salí vi al supuesto delincuente en el piso con el arma, estaba muy mal, pero el que le había disparado seguía allí esperando a las autoridades”, agregó otro ciudadano.
Según un agente de policía que se encontraba ayer en el acordonamiento de la escena en la que murió el pillo, el militar dio aviso a las autoridades y esperó a que llegaran los policías para contar lo ocurrido. También trascendió ayer que el otro pillo huyó del lugar del hecho.
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Cuando los uniformados llegaron, dicen allí, encontraron que el herido todavía contaba con signos vitales, por lo que lo trasladaron hasta el Hospital de Engativá. Al poco tiempo de haber ingresado, el personal médico indicó que el lesionado había fallecido.
“Al sargento primero se le incautó un arma tipo pistola, calibre 9 milímetros con 5 cartuchos. En el lugar de la escena se encontraron casquillos del arma de fuego y otros de un arma traumática”, indicó una fuente anónima a este medio.
Autoridades hablan sobre caso en La Riviera
Frente a estos hechos, Q’HUBO conoció de manera extraoficial que la víctima tendría aproximadamente 25 años. Por el momento no hay un pronunciamiento oficial de las autoridades, pero se sabe que el militar estaba en las diligencias pertinentes para aportar la información necesaria frente a este caso.
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Además, la unidad criminalística del CTI hizo presencia en el lugar de los hechos, en el barrio La Riviera, a eso de las 10 de la mañana y así recolectar el material probatorio.
“Hay unas cámaras de seguridad del sector que deberán solicitar los del CTI”, agregó un agente de policía en el lugar.
Entre tanto, mientras el reguero de sangre quedó ayer sobre el cemento tras el terrible episodio, los residentes de este barrio denunciaron que la delincuencia en ese punto está desbordada y que han sido varias las víctimas que han tenido que vivir momentos de pánico, además de ver con tristeza cómo los ladrones se llevan sus pertenencias que con tanto esfuerzo han conseguido.
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