El dato del crecimiento de la economía de abril (5,52 %) sorprendió a muchos analistas del mercado, pero de manera positiva, quienes si bien esperaban un dato positivo que oscilara, no pensaron que fuera a llegar a nivel reportado por la entidad.
No obstante, según el análisis de Carlos Arturo García, periodista económico de EL TIEMPO, el consenso de varios expertos apunta a que todavía no es momento de cantar victoria y que habrá que esperar el dato del comportamiento de la economía del mes de mayo y que llegue la ejecución de tan anhelado plan de reactivación anunciado para que la dinámica del país pueda despertar.
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Según explica, ese desempeño de la economía estuvo impulsado por las actividades primarias, de las cuales hacen parte agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca; y Explotación de minas y canteras, que presentaron una dinámica anual del 10,24 %.
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Por su parte, las actividades secundarias (Industrias manufactureras; y Construcción) avanzaron solo 2,85 %, respecto a abril del año pasado, mientras que las terciarias, entre las que se cuentan el suministro de electricidad, gas, vapor y aire acondicionado; Distribución de agua; Comercio al por mayor y al por menor, y Reparación de vehículos automotores y motocicletas, entre otras, presentaron un avance de 5,09 %.
«No hay que pasar por alto que la inversión sigue golpeada, por lo que no se pierde el mensaje de agenda de reactivación. El sector secundario, es decir, construcción e industria, lleva en lo corrido del año una caída de 2,8 por ciento. Sin inversión, sigue siendo vigente el problema de crecimiento de mediano y largo plazo«, advierte Cesar Pabón Camacho, director Ejecutivo de Investigaciones Económicas de Corficolombiana.
Este desempeño económico, según menciona García, no se observaba desde septiembre de 2022, cuando se llegó un 4,21 % en el Índice de Seguimiento a la Economía (ISE), según las estadísticas reveladas por el Dane.
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Sin embargo, esa dinámica está explicada, en buena medida, por un efecto calendario y la ocurrencia de la Semana Santa, según le indicaron Luis Fernando Mejía y José Ignacio López, directores de los centros de estudios económicos de Fedesarrollo y Anif, respectivamente.
«La Semana Santa este año fue en marzo, mientras en el 2023 en abril. Ajustado por ese efecto calendario y factores estacionales, el crecimiento económico fue de 4 % anual en abril, superando la expectativa del mercado«, indicó Mejía, mientras que López advierte que si bien esa cifra es positiva, no deja de ser preocupante aún, pues en su opinión todavía hay renglones importantes como industria y comercio con datos débiles.
Según el presidente de la Anif, es claro que hasta no tener las cifras de mayo a la mano, es complicado saber a ciencia cierta que tan persistente o definitivo será ese rebote de abril, aunque no desconoce que la industria, por efecto calendario, tuvo mejores resultados.
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«Sorprende también de forma positiva los sectores agropecuario, que tuvo alguna cosechas de productos buenas, administración pública e hidrocarburos, teniendo en cuenta que abril fue un mes con producción de petróleo al alza«, dice.
Al darse a conocer el dato de la dinámica en la economía de abril, el presidente Gustavo Petro publicó en su cuenta de X: «Bien en agricultura, en turismo extranjero, bien en industria. La reactivación ha comenzado después del recalentamiento artificial de Duque y su alza de inflación. Bajamos la inflación y reactivamos la producción que es la que genera la riqueza. Agricultura sin café. Crecimiento en un año: 9,3 %; Turismo extranjero; 7,3 %; Industria: 4,1 %«.
No obstante, las críticas a la visión del Gobierno sobre los datos de crecimiento económico de abril no se hicieron especial. José Manuel Restrepo, rector de la Universidad EIA y exministro de Hacienda y de Comercio, le respondió al jefe de Estado: «Presidente. El primer pasó para mejorar es siempre reconocer lo que no está bien y es mejorable, en beneficio de los colombianos. Hay mejoras, pero la tendencia del PIB es de cuidado«.
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Restrepo señaló, además, que el índice de producción industrial sigue teniendo una tendencia decreciente, que el comercio, una gran fuente de empleo, lleva 17 meses a la baja, que la inversión privada completa cinco trimestres con cifras de dos dígitos a la baja, que el país registró el peor trimestre de creación de empresas en cuatro años, que el turismo nacional y la gastronomía siguen a la baja y que la recuperación de la construcción sigue siendo débil, razones que también explican el bajo recaudo tributario.
Juan Daniel Oviedo, exdirector del Dane y hoy concejal de Bogotá, también se unió a los cuestionamientos frente a los datos que publicó la entidad estadística y que compartió el presidente: «deberían ayudarle a reflexionar que no vamos por buen camino«, añadiendo que los sectores que él considera claves en su política económica están muy debilitados hoy día.
Puede leer el análisis completo de Carlos Arturo García en este enlace.
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*Con información de EL TIEMPO – ECONOMÍA
