Para viajar a Liberland solo es necesaria una dosis de imaginación. Es una “república libre” ubicada en Europa, sin habitantes o edificios y cuyo presidente, Vít Jedlička, se eligió democráticamente por dos votos, el de su novia y su mejor amigo, en una particular elección de abril de 2015 cuando clavó una bandera amarilla en medio de una tierra de nadie.
Jedlička encontró un latifundio olvidado entre Croacia y Serbia, con 7 kilómetros cuadrados de extensión, una parte del…