En el corregimiento de Arache, municipio de Chimá, un joven permanece ‘enterrado’ con la creencia de que así se le saldrá del cuerpo la energía de un rayo que lo impactó.
El protagonista de esta particular historia es Luis Alfonso Banda Salgado.
Aunque la descarga eléctrica no afectó de gravedad al hombre, sus familiares decidieron cavar un hueco y meterlo hasta el cuello.
De acuerdo con la creencia, esto le ayudará a expulsar la energía que todavía tiene en su cuerpo.
Aunque médicos consultados manifestaron que científicamente esta práctica no tiene resultados positivos.