El pasado domingo 29 de mayo, Colombia vivió la primera vuelta presidencial. El vencedor fue el candidato Gustavo Petro, con más de 8,5 millones de votos (40,32 %), seguido de Rodolfo Hernández, con más de 5,9 millones de votos (28,15 %).
Ambos se enfrentarán en la segunda vuelta, programada para el domingo 19 de junio.
(Vea: El 62,3 % de los hogares tiene menos acceso a bienes básicos).
Ante el panorama que dejó la primera vuelta, la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif) y el Banco AV Villas analizaron los efectos en la política económica del país.
La primera conclusión es que este nuevo escenario, teniendo en cuenta lo que sería un giro en la política tradicional colombiana y las posibilidades de una segunda vuelta más reñida, «se ha traducido en altas expectativas de que no habrá un cambio radical en el manejo de la política económica del país«.
Tanto el centro de estudios como el banco resaltaron la importancia que tendrá, en las próximas semanas, las decisiones que se tomen en materia fiscal, pensional y laboral, así como en la sostenibilidad de las cuentas nacionales.
(Vea: Se mueven las fichas: los apoyos a Petro para la segunda vuelta).
«El problema fiscal, insistimos, no se zanja simplemente con mecanismos que persigan y castiguen la corrupción, el déficit es muy grande y necesita de reformas serias, por lo menos en los dos impuestos que más recaudo generan, que son la renta y el IVA«, agregaron.
Para ambas entidades, es necesario aumentar la base de contribuyentes (personas naturales) de renta y hay que eliminar las exenciones de IVA, «que, a la larga, son un subsidio a las personas de mayores ingresos«.
«El costo fiscal de las exenciones tributarias, principalmente de IVA y renta, según el Gobierno Nacional, incrementa año tras año. Solo en el 2019 alcanzó el 8,9 % del PIB«, complementaron.
(Vea: El ‘platal’ que Rodolfo Hernández les paga a sus empleados).
Y es que, según su análisis, solo el costo de las exenciones únicamente del IVA en 2019 habría equivalido a $52 billones de pesos.
«La tarifa del IVA podrá reducirse paulatinamente solo cuando el complejo sistema de exenciones se solucione y se garantice la devolución del impuesto a los hogares
de menores ingresos«, aseguraron.
En cuanto al impuestos del 4×1.000, que, por ejemplo, Rodolfo Hernández ha propuesto su eliminación, manifestaron que si bien es «distorsionante, representa un ingreso tributario permanente para las cuentas fiscales, por lo que su eliminación será viable siempre y cuando se sustituya con otra fuente de ingresos«.
(Vea: ¿Se puede inscribir la cédula para votar en segunda vuelta?).
E invitaron a los candidatos a que entiendan la situación fiscal actual del país y la necesidad de incrementar los ingresos tributarios de manera progresiva durante la próxima década, «en al menos 5 puntos del PIB, para hacer sostenibles las cuentas, el
nivel de la deuda y financiar las necesidades del país«.
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