En medio de las diversas alertas que se vienen lanzando en el país por cuenta de la crisis fiscal que el mismo Ministerio de Hacienda ya reconoció, mientras anunciaba un plan de recorte de gasto para hacerle frente, este miércoles 12 de junio se conoció un reporte de la agencia Moody’s, en el cual se advierte que todas estas afectaciones dejarán consecuencias.
Durante una conversación con medios de comunicación, esta calificadora de riesgo indicó que actualmente evalúa a Colombia en la categoría Baa2 con perspectiva estable, dejándola al mismo nivel que naciones como México, Hungría, Filipinas o Indonesia, pero por debajo de pares regionales como Perú, Uruguay o España, esta última en Europa.
Si bien esta calificación no representa grandes variaciones para el país, en lo que concierne a esta calificación por ahora, Moody’s dejó claro que hay riesgos que podrían llevar a un cambio en esta perspectiva debido al deterioro macroeconómico que se está viendo durante los últimos meses y dijo que hay que adoptar medidas urgentes.
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En este sentido, Renzo Merino, vicepresidente y analista senior de Moody’s Ratings, manifestó que no hay que pasar alto que en este momento Colombia enfrenta un escenario desafiante y todas las decisiones que se tomen serán fundamentales para saber si al final de la tormenta, la economía se mantiene a flote o sucumbe ante las presiones, lo que afectarìa seriamente las calificaciones.
“Lo que queremos analizar es si esa tendencia de deterioro se va a revertir o se va a estabilizar después del 2024 o si podríamos ver mayores deterioros en los próximos años. Ahí está el enfoque de nuestro análisis”, dijo Merino.
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Sin embargo, para este analista de Moody’s hay que dejar claro que “hemos notado el compromiso de las autoridades por cumplir con los parámetros de la regla fiscal y entendemos que habrían ajustes en la medida de lo posible para asegurar el cumplimiento de esto”, situación que calificaron como positiva, entendiendo que este es uno de los temas a cuidar en el mediano y largo plazo.
La calificadora de riesgo también habló de lo que piensa sobre el recorte de gasto que anunció el Ministerio de Hacienda y dejó claro que “el tipo de gasto que se pueda recortar es importante, sobre todo si se da en el contexto de un recorte de gasto de inversión que puede ayudar a fomentar la actividad económica, pero también hay que hacer notar que actualmente hay recursos que ya han sido asignados y que no se han ejecutado todavía”.
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Impulsar la recuperación
Si bien para Moody’s el contexto macroeconómico actual está acercando a Colombia a un escenario desfavorable que podría desencadenar un ajuste en la calificación crediticia, su equipo de analistas hizo énfasis en que se puede dar vuelta a la mala racha, si se toman decisiones acertadas y se estimula el motor de la inversión.
Si bien Renzo Merino agregó que la agencia está preocupada por la posibilidad de un mayor deterioro en los próximos años, resaltó que un primer paso está en garantizar el cumplimiento de la regla fiscal, reconociendo el compromiso de las autoridades colombianas por adherirse a estos parámetros y realizar ajustes necesarios para asegurar el cumplimiento.
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“Esperamos que las dinámicas de inversión mejoren levemente ante el transcurso del 2024. Entendemos que en el 2023 hubo dinámicas de tasas de interés y también de confianza por parte de los inversionistas que afectaron las dinámicas, además de que la inversión en el 2022 en obras públicas o en construcción residencial, por ejemplo, fue muy fuerte”, explicó.
Así las cosas, de cara al largo plazo, el vocero de Moody’s manifestó que “nosotros esperamos que para el 2025 mejoren las dinámicas de inversión, mejoren las dinámicas de consumo en el país, sobre todo teniendo en cuenta que la tasa de interés de la política monetaria probablemente siga reduciéndose en los próximos meses, y esto ayude a que la economía pase a crecer”.
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Con esto en el radar, la agencia de riesgo proyecta un crecimiento económico de 1,3% para Colombia en 2024, anticipando una leve mejora en las dinámicas de inversión y consumo. Para 2025, se espera que la tasa de crecimiento se acerque al 2,5% o 3%, impulsada por la reducción de la tasa de interés y una mayor confianza de los inversionistas y en 2026, un año electoral, se prevé que el crecimiento se estabilice en torno al 3%, reflejando el crecimiento tendencial del país.
En este sentido, Merino enfatizó que cualquier desviación significativa de los parámetros establecidos por la regla fiscal podría ejercer una presión negativa significativa sobre el perfil crediticio de Colombia, reiterando que la sostenibilidad y fuerza del crecimiento del PIB dependerá en gran medida de una actuación responsable.
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“Colombia ya llevó a cabo dos reformas tributarias en años recientes que sí han ayudado a incrementar los ingresos estructurales y tributarios del Gobierno de manera más permanente, aunque obviamente estos ingresos van a estar supeditados a las dinámicas de crecimiento”, manifestó.
Por último respecto a la necesidad o posibilidad de una nueva reforma tributaria para generar los ingresos que hacen falta, desde Moody’s indicaron que “no esperaríamos que haya una reforma tan amplia como las que se llevaron a cabo en el año 2021 y en el 2022. Habiendo dicho eso, nosotros sí creemos que hay temas por el lado del gasto que han presionado las cuentas fiscales en los últimos años”.
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Así las cosas, esta calificadora se suma a las voces de quienes sostienen que más allá de buscar recursos o fuentes de ingresos, la salida a la crisis de caja que enfrenta el Gobierno podría estar inicialmente en un recorte de gastos, tal cual como se está haciendo desde el Ministerio de Hacienda, aunque piden tener cuidado con los recursos de la inversión, que consideran importantes para superar la desaceleración.