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Una médica del hospital San Francisco de Asís en Quibdó, capital del Chocó, hace parte de los 30 funcionarios que son víctimas de extorsiones y amenazas por parte de un grupo delincuencial. La doctora asegura que no tiene paz y tampoco salud mental.
“Hace dos, tres días, lloraba, me acostaba, me levantaba, igual, al otro día tenía que venir a trabajar y, sin embargo, aquí estoy”, contó.
La Policía asegura que, aunque no hay muchas denuncias por parte del personal de la salud, se investiga quiénes estarían detrás de los panfletos intimidantes.
“Algunos como Rapados, otros como USA, otros como los Z, ahora los Mexicanos. Entonces, quieren extorsionar a la misma persona con diferentes panfletos, pero son los mismos delincuentes”, afirmó el coronel Clauder Cardona, comandante de la Policía de Chocó.
Por otra parte, diferentes voces se unen al SOS al Ministerio de Salud para que se dé pronta solución a la crisis financiera, de equipos, insumos y medicamentos para el hospital.
“Que todas las personas que tengan que ver con esta situación del hospital San Francisco de Quibdó, que se metan la mano al corazón, porque ya no aguantamos más”, dijo Luz Estella Gallón, auxiliar de enfermería.
“¿Hasta cuándo va a seguir esta ignominia de nuestra clase dirigente de permitir que el mejor centro hospitalario que tiene Quibdó y el Chocó esté en esta situación?”, cuestionó Alejo Restrepo, usuario del hospital.
Las deudas del hospital San Francisco de Asís ascienden a 27.000 millones de pesos, 9.000 de ellos hacen parte de los salarios.
