Por Alvaro Morales de León.
Las obras anunciadas por el alcalde Dumek Turbay sobre la construcción de lo que él denomina Intercambiadores Viales no cumplen con el concepto técnico y arquitectónico de intercambiadores viales.
Lo que Turbay llama Intercambiadores son en realidad medianos viaductos destinados a mejorar la movilidad y “desembotellar” ciertos sectores congestionados del tráfico vehicular en la ciudad. Según lo anunciado, con una inversión millonaria respaldada por un crédito de 1.5 billones de pesos aprobado por el Concejo Distrital de Cartagena en agosto del año pasado, se construirán cuatro obras: una en la entrada al barrio de La Carolina, otra en la Bomba del Amparo, otra en la entrada al barrio de Ceballos, y la última en la carretera Troncal de Occidente, donde se forma un constante trancón a la altura del ingreso al barrio de Ternera.
Sin embargo, como mencioné al principio, lo que el alcalde Dumek Turbay califica como Intercambiadores Viales no lo son, ya que estas obras no van a servir para el intercambio que su nombre sugiere. No intercambiarán nada, sino que permitirán que, a través de vías elevadas (viaductos), se descargue el tráfico vehicular en vías adyacentes, lo cual no se considera un intercambiador.
El verdadero concepto de intercambiador vial es diferente al que ha “vendido” Dumek para impresionar a los cartageneros, posiblemente engañando a personas poco informadas o a quienes no han viajado a otros países, incluyendo Europa, especialmente España. Un intercambiador vial es una obra que, como su nombre indica, permite el intercambio de un medio de transporte por otro en un recorrido determinado.
Por ejemplo, en Madrid, España, existe el Intercambiador de Transporte Avenida de América, que es una estación de alto flujo de usuarios que conecta líneas de autobuses urbanos, interurbanos y el Metro. Este intercambiador permite a los usuarios recorrer toda la península ibérica y muchos países de Europa. Consta de varios niveles, destinando los superiores a autobuses y los del sótano al Metro, y cuenta con cafeterías, minimercados, baños, y suficientes parqueaderos.
En resumen, este es el verdadero concepto de un intercambiador vial: un lugar donde el usuario llega en un medio de transporte, como un autobús, y puede cambiar a otro, como el Metro, si así lo desea.
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