El pasado 31 de diciembre, Kevin Bocanegra se encontraba con su novia, Jois Ramírez, y su suegra en el Nevado del Tolima, realizando una travesía de montañismo para recibir el Año Nuevo en un lugar diferente y en contacto con la naturaleza.
Ahora, días después de su muerte, Jois compartió detalles de lo ocurrido durante una entrevista en el podcast Más allá del silencio. Según ella, un primo de Kevin, contratado como guía, lideró la expedición, pero no estaba certificado por el Parque Nacional Natural Los Nevados. Jois asegura que el guía actuó de forma irresponsable y no estaba preparado para manejar situaciones críticas.
Una travesía mortal
Durante el ascenso, el guía mostró síntomas de gripe, los cuales Kevin también empezó a experimentar. Sin recibir advertencias para detenerse, decidieron continuar. Sin embargo, al llegar al sector conocido como El Calvito, Kevin se sintió muy mal y pidió quedarse en las carpas. Antes de separarse, le dijo a Jois: “Ve que yo te preparé para subir a ti y a tu mamá”, alentándola a continuar.
Cuando Jois regresó de la cima, encontró a Kevin debilitado y sin ánimos de continuar. Pidió ayuda al guía para activar el seguro, pero este le informó que no había señal en la zona. Poco después, Kevin comenzó a expulsar un líquido amarillo por la nariz y a convulsionar.
Entre los turistas presentes, un médico estadounidense ayudó a estabilizar a Kevin y les brindó provisiones como agua y comida. Un arriero llegó con un caballo para trasladar al joven, quien ya presentaba fuertes dolores en el pecho.
El desenlace
Una vez logran bajar al joven de la montaña y llegar la Finca La Primavera, tanto a Jois como a su madre las tratan de forma hostil, según lo relatado por la mujer. Y allí le informan a la madre de Jois que Kevin ya había muerto; sin embargo, no le comentaron nada a la novia.
“No me decían nada. Así que entra la señora de la cocina, le cojo los brazos con fuerza y le dije, ‘se lo prometo que no voy a gritar’. Yo intuí que quizás ellos querían evitar el escándalo porque había mucho turista. Yo necesitaba ver a Kevin y ver que estaba bien (…). Cuando llegamos a la puerta yo me salí, ella me intentó tomar a la fuerza y yo le grité, ‘nadie tiene el derecho de esconderme lo que está pasando’. Y cuando volteo a ver, había un establo donde llegaban los arrieros con sus caballos y estaba Kevin envuelto en lonas, amarrado con cuerdas. A mi mamá sí le permitieron ver a Kevin”, narró Jois
Posteriormente, el cuerpo sin vida lo subieron unos arrieros en un caballo para sacarlo de la finca. “Presencio cuando lo meten en unos cartones, en un trapo, como si fuera un animal. Buscan unas lonas, entre ellos se hacen chanzas, se ríen, lo amarran de la peor manera”, agregó Julieth, suegra de Kevin.
Entre su desesperación Julieth le pregunta al arriero que revise el estado de salud de su yerno, a lo que el hombre le responde: ’Él se murió hace rato, mami. ¿No sabía? Más bien deje la bulla, calme a esa niña y váyanse’”.
Y agregó Jois: “Una persona de la finca nos hace un comentario y nos dice en voz baja, a modo de susurro: ‘Salgan de acá, el dueño de estas fincas es muy poderoso y esta situación no va a traer nada bueno, váyanse’”.
A las 10 p. m. del 31 de diciembre, Jois y su madre abandonaron la finca La Primavera, mientras el cuerpo de Kevin era transportado en un caballo hacia el Valle de Cocora, Quindío, donde las autoridades realizaron el levantamiento del cadáver.
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