Noticias Barranquilla.
Desde la zona los usuarios alegan no tener los recursos para pagar la alta suma de dinero y tienen un daño que no se ha podido reparar.
La deuda según Air-e, es de $3.539 millones por concepto de servicio de energía eléctrica, de meses y años, en un barrio que es de desarrollo subnormal (invasión) en La Pradera.
Ahora, hay que buscar un acuerdo.
En el sitio hubo un daño, se quedaron sin luz pero el arreglo no se podía hacer de manera inmediata dada la alta morosidad de varias familias (el 95%).
Ya se han realizado algunas reuniones.
Ante esta situación, “se espera la respuesta positiva de la comunidad y la Alcaldía para superar un daño que se presenta en inmediaciones de la calle 123 con carrera 18 en el sector de la Gallera”, explicó en un comunicado la empresa.
Sin embargo, desde la zona los ciudadanos alegan no tener los recursos para pagar la alta suma de dinero.
Por ahora, la Alcaldía Distrital no se ha pronunciado pero sería necesaria su intervención para buscar una solución. El riesgo, es que la misma comunidad decida “arreglar” el daño, seguir conectados irregularmente y que pueda generarse una tragedia.
Fraude, alto costo
Según cálculos de la empresa Air-e, al año se dejan de facturar cerca de 60 mil millones debido a la problemática de conexiones fraudulentas en hogares e industrias en los departamentos del Atlántico, Magdalena y La Guajira.
Más exactamente en el Atlántico se roban al mes alrededor de 125 gigavatios de energía; en el Magdalena, 54, y en La Guajira, 31, detalló la compañía que suministra el servicio de energía a dichas regiones del país.
La empresa menciona que de cada 100 kilovatios que se compran a los generadores, se roban 35 y solo se puede facturar en el recibo el 65% de la energía.
Es por esto que una de las apuestas de la compañía es a combatir el uso fraudulento de la energía en la región.
Con varias comunidades y deudores morosos se han alcanzado acuerdos.
Las facturas en cientos de hogares y hasta negocios, se van acumulando. Algunos, solo pagan una pequeña parte del consumo, muchos otros alteran las conexiones en su hogar pero esto al final, termina reflejado en el consumo.
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