El alcalde del municipio de Villamaría, Andrés Aristizábal Parra, ante la suspensión del programa de vacunación COVID-19 por parte del Hospital Departamental San Antonio, el cual fue informado a la administración municipal por el gerente del centro médico, Guillermo Alzate, a través del oficio DG 700-143, hizo un llamado respetuoso a la Dirección Territorial de Salud de Caldas para que compartan con los cerca de 70.000 habitantes con los que cuenta esa localidad del centro sur caldense, cuál será el destino de dicho proceso para la aplicación de biológicos desde el 1 de octubre.
Expresó que, no se ha recibido pronunciamiento oficial por parte de entidad, como ente encargado del hospital.
Agregó que, la Alcaldía de Villamaría es consciente del gran impacto que esta situación puede causar en el municipio y aclara que nunca se ha sustraído, ni se sustraerá de buscar soluciones a temas tan trascendentales como el que hoy ocupa a los villamarianos.
Manifestó que, sí agradecería que decisiones de este tipo sean comunicadas de manera oportuna y oficial, ya que la municipalidad, no solo es la primera afectada, sino que las relaciones con todo el personal del Centro Hospitalario han sido manejadas de modo asertivo en el actual cuatrienio, en especial desde el inicio de la pandemia.
Por último expresó que, nuevamente hace un llamado a mantener los buenos oficios, que en esta oportunidad buscan la continuidad de un plan de vacunación, que fue suspendido de manera unilateral por la Junta Directiva del Hospital y que podría acarrear consecuencias funestas para toda la población.
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