El presidente de Cafeteros del Tolima habla sobre la situación actual del gremio en el departamento y afirma que una de las problemáticas son los temas de seguridad.
Gildardo Monroy, representante de los cafeteros del Tolima, ha compartido un análisis sobre la situación actual del sector, destacando tanto los logros como las dificultades que enfrentan los agricultores. El lider manifiesta que a pesar de los buenos precios del café, que han superado los dos millones de pesos, y el convenio con la gobernación del Tolima para incentivar la renovación de capitales con más de cinco mil millones de pesos, el panorama no es del todo optimista.
Monroy señaló que el prolongado verano ha comenzado a afectar la calidad del café y el estado de las vías terciarias, complicando el acceso a los cultivos. Además, la seguridad se ha convertido en un tema preocupante, con la reciente presencia de grupos al margen de la ley que generan intranquilidad entre los agricultores e impactan la inversión en el sector.
A pesar de los desafíos, Monroy es optimista sobre la producción cafetera, afirmando que el Tolima genera más de 70,000 empleos directos relacionados con el café, y más de 170,000 empleos indirectos. La cosecha cafetera continúa siendo un pilar fundamental de la economía agrícola del departamento, beneficiando a más de 64,000 familias en 38 municipios.
El representante destacó la importancia de la colaboración con la gobernación y los alcaldes para fomentar la innovación y el desarrollo en el sector. Mencionó iniciativas como la plataforma Cafis, que permite a los productores exportar su café, y «Yo Compro Café Colombia», que facilita la venta de café con marca a nivel nacional e internacional.
Sin embargo, la extorsión por parte de grupos armados ha sido una preocupación creciente. Monroy explicó que estos grupos ven la producción de café como una fuente de ingresos fácil, ya que el café es dinero en efectivo. En respuesta, se está trabajando en conjunto con el ejército y la policía para generar oportunidades de prevención y seguridad.
A pesar de los desafíos, Monroy reafirmó su compromiso de seguir sembrando paz en el Tolima y en Colombia, confiando en que el trabajo conjunto con las instituciones y la comunidad permitirá superar las adversidades.