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A sus 31 años, el futbolista vallecaucano dejó el fútbol para buscar otros horizontes.
Noticias de Colombia.
Johan Arango es un futbolista profesional muy talentoso que ha jugado en clubes como América de Cali, Once Caldas, DIM, Santa Fe, Pasto y otras selecciones nacionales.
A nivel internacional, ha estado en Juárez en México y Al-Batin en Arabia Saudita. También se desempeñó en la Universidad de Tamaulipas en el país azteca y Binacional en Perú, antes de regresar a Colombia para fichar por Jaguares de Córdoba.
Precisamente en su último club de la Liga Profesional, solo duró un mes tras firmar contrato por lo que resta de temporada 2022.
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Tras su renuncia, Arango, nacido en Cali, Valle del Cauca, hace 31 años, alegó en su momento que abandonó el club cordobés por «incomodidades familiares» y no siguió adelante con el asunto.
Su paso por el equipo de la ciudad de Montería no fue exitoso y no tuvo oportunidad de marcar goles y solo jugó 135 minutos en el campo.
Luego de varios días de esta polémica decisión, se supo que Arnago incursionaba en otro negocio millonario.
El futbolista ha «colgado los guayos» para adentrarse en el mundo matemático del «trading», una actividad que florece cada día en las nuevas generaciones.
Cabe señalar que “trading” es la actividad de especulación en los mercados financieros con el objetivo de obtener una ganancia o beneficio, cita el portal Mercados del almiranteespecializado en el tema.
Esta actividad consiste en la compra o venta de activos financieros de diferente tipo, acciones, divisas, commodities y criptomonedas, entre otros. Cuanto más líquido sea el activo, mejor.
Al parecer, Arango lleva meses realizando estos movimientos financieros, lo que le ha dejado buenos rendimientos. Según información de otra página de negocios profesionales, el exjugador del Independiente Santa Fe tiene rendimientos mensuales de alrededor de $12,000, o unos 45 millones de pesos colombianos, en dicho negocio.
Arango se encuentra en la cordillera «Esmeralda», una de las más altas.
Para muchos es una sorpresa que el futbolista tomara la decisión de alejarse del fútbol y enfocarse en el comercio a una edad en la que aún podía rendir en los terrenos de juego. Más aún, sabiendo que los sueldos de los jugadores tanto en Colombia como en el exterior son rentables para perseguir de esta manera su proyecto de vida ante un retiro forzado por la edad o una lesión grave.
Sin embargo, al igual que Arango, hay otros jugadores que han «colgado las botas para dedicarse a otras tareas, antes de la hora señalada para la jubilación de un futbolista profesional que, de media, tiene entre 37 y 39 años».
Este es el caso del arquero colombiano Cristian Bonilla, quien a los 28 años dijo estar «terminado» con el fútbol para emprender inversiones inmobiliarias en Estados Unidos.
Foto de portada: @golcaracoltv
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