En la noche del sábado, 5 de noviembre, se registró una nueva emergencia en el municipio de San José de Uré, luego de que las lluvias terminaran ocasionando el desbordamiento de la quebrada que lleva el mismo nombre, y gran parte de la zona urbana y rural se viera afectada por el arrastre de sedimentos y las inundaciones.
De acuerdo con la información conocida los sectores más afectados fueron Rabolargo, El Centro, El 60, El Tolú, Tarazá, La Esperanza y el sector de la Policía. Entretanto, otras comunidades rurales como Versalles, Doradas, Pueblo Flecha y Bocas de Uré, también sufrieron por la emergencia.
Es de mencionar que esta situación generó el desplazamiento de decenas de familias que, entre esa noche y la madrugada del pasado domingo, 6 de noviembre, tuvieron que abandonar sus viviendas y vieron perdidos varios de sus enseres, así como también, se debilitó la infraestructura de la Institución Educativa Versalles.
Por otro lado, en la mañana del pasado domingo el secretario del Interior, Jairo Baquero, por disposición del gobernador Orlando Benítez, presidió un consejo de gestión del riesgo en esta localidad para evaluar la situación y tomar varias medidas, entre ellas, la terminación del censo de familias afectadas.
“Solicitamos al Gobierno Nacional y a la Dirección Nacional de Gestión de Riesgo, su acompañamiento y apoyo en estos momentos donde nuestro pueblo más nos necesita”, precisó Benítez a través de su cuenta de Twitter.
Hasta el momento la temporada de lluvias deja cerca de 52 mil personas damnificadas en los 30 municipios cordobeses.