El programa «Club 16, Dejando huella, sembrando vida» del Hemocentro del Café culminó este año con un emotivo reconocimiento a 154 estudiantes de 16 establecimientos educativos de Manizales por su destacada labor en la promoción de cultura ciudadana a través del servicio social.
Una de las novedades más significativas de esta edición es que dos estudiantes del colegio INEM, quienes tienen discapacidad auditiva, participaron activamente en el programa. Esta inclusión marca un hito en los 10 años de existencia de esta iniciativa, demostrando un enfoque verdaderamente inclusivo y resaltando la importancia de la diversidad en la sociedad.
Durante el servicio social, estos jóvenes desempeñaron un papel fundamental en la promoción de la donación voluntaria de sangre, fortaleciendo valores de altruismo y solidaridad en la comunidad. Las actividades llevadas a cabo por estos adolescentes tuvieron como objetivo crear conciencia sobre la importancia de donar sangre y contribuir así a salvar vidas.
Sonia Giraldo Valencia, profesional de la Unidad de Calidad de la Secretaría de Educación de Manizales, expresó su gratitud por esta iniciativa y destacó la colaboración entre el programa y la Secretaría de Educación en la construcción de un ecosistema de cultura ciudadana en la ciudad, denominado «Ciudad Cerebro».
Rafael Giraldo Llano, gerente del Hemocentro del Café, compartió su entusiasmo por la certificación de 3 mil estudiantes de colegios urbanos y rurales de la capital de Caldas hasta la fecha. Además, extendió una invitación a otras instituciones educativas para unirse a este loable esfuerzo y aprender sobre la importancia de la donación de sangre.
El enfoque inclusivo del programa fue resaltado por Giraldo Llano al mencionar que esta fue la primera vez que dos estudiantes con discapacidad auditiva del colegio INEM participaron en el programa, lo cual resultó en una experiencia enriquecedora para todos los involucrados.
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