La reforma de la salud, que pasó de “estar negociada en un 99%” a no tener los votos de los partidos Conservador y ‘la U’, parece ser, según analistas y exministros, el proyecto que motivó la crisis ministerial y rompió a una coalición de gobierno muy variopinta, conformada por partidos tradicionales como el Conservador, el Liberal, ‘la U’, y otros más cercano al progresismo que propone el presidente Petro.
La llegada de los siete nuevos ministros se da, en principio, para que todo su gabinete esté encaminado al “pacto social” por el que votaron 10 millones de colombianos. Eso, según afirma el mismo mandatario, pero en plata blanca es para destrabar el trámite de sus reformas estructurales (salud, pensional y laboral) en el Congreso.
(‘Gobierno quiere pasar la reforma de la salud con estructura original’).
Pero este escenario, como afirma el exministro de Salud, Fernando Ruiz, “muestra un pulso entre congresistas, los líderes de los partidos y el Gobierno”.
(Se cumplió la ‘profecía’ de Alejandro Gaviria sobre el gobierno Petro).
Por otra parte, Mauricio Jaramillo Jassir, profesor de Estudios Internacionales, Políticos y Urbanos de la Universidad del Rosario, afirma que esos cambios se pueden leer como “otra ofensiva del Gobierno para presionar a los partidos” y en esa medida, Theodore Kahn, director asociado de Control Risks, aseguró que “puede que venga una relación más conflictiva entre el Ejecutivo y el Legislativo, porque han salido varios de los ministros que eran considerados cuota de los partidos de la coalición”.
(Guillermo Jaramillo trabajará de nuevo con Petro: es el nuevo Minsalud).
En el caso de la reforma de la salud, la llegada de Guillermo Jaramillo al ministerio es una puerta que se abre para negociar, porque como afirma el académico, “incluso desde sectores de la oposición lo reconocen”.
(Qué fue la renuncia protocolaria que Petro les pidió a sus ministros).
Pese a que aún no se puede decir si esa jugada podría resultar bien o mal, Jaramillo agrega que “puede que con esto Petro recupere gobernabilidad. Lo peor que podría pasar es que las reformas se empiecen a retrasar y se pierda un poco lo que el Gobierno ha propuesto en materia social”.
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