“Yo vi que los pelados venían corriendo, acababan de tener una pelea o algo por que el que venía detrás estaba envenenado, venía insultando al otro chico. El que venía huyendo se metió en una tienda porque ya venía mamado y pensó que podía resguardarse ahí, pero al otro le valió huevo y le pegó una puñalada en el pecho. La policía como que venía siguiéndolos porque llegaron de una y se llevaron a los dos pelados. Luego nos enteramos que ambos eran unos peladitos menores de edad. Uno para el cementerio y el otro para una cárcel”, le contó ayer a Q’HUBO un comerciante de la zona que desde su local tuvo que atestiguar la muerte de un menor de 16 años la noche de este viernes en el barrio Santa Librada, en la localidad de Usme.
Los hechos…
Todo ocurrió cerca de las 7 de la noche. La riña en la que se enfrascaron los adolescentes empezó a unas dos cuadras del lugar donde finalmente sucedió despiadado ataque.
Vecinos de la zona coinciden en que se escuchaba la gritería y los insultos que se proferían mientras uno perseguía al otro, razón por la cual varios de ellos alertaron a uniformados adscritos al CAI Santa Librada cuando se percataron que uno de los involucrados tenía un cuchillo.
La persecución duró unos pocos minutos hasta que la víctima de 16 años, al verse alcanzado, decidió entrar a una pequeña tienda ubicada en la Calle 73 Sur con Carrera 12, a la altura del barrio Brasilia.
A su contrincante esto poco le importó y ante la mirada atónita de las personas que se encontraban en el establecimiento comercia y frente a varios testigos de la persecución, procedió a herir de muerte al hoy occiso.
Una mortal puñalada en el pecho dejó al joven de 16 años tendido en el suelo. Los policías, que venían detrás de ellos, procedieron a trasladar inmediatamente al herido al hospital de Meissen.
El agresor, quien tenía varias heridas leves, fue trasladado al Centro de Atención Médica Inmediata (CAMI) de Santa Librada.
Tras ser atendido y verificar que su estado de salud no revestía gravedad, los uniformados procedieron a detener al señalado agresor, a quien le leyeron los derechos como persona capturada y procedieron a trasladarlo a un centro especial para menores de edad.
Por su parte, el joven herido, quien para el momento del traslado ya había perdido una importante cantidad de sangre, herido de muerte iba luchando por sobrevivir al interior de la patrulla que lo llevaba de urgencia al hospital de Meissen.
Cuando arribaron al centro hospitalario ya era muy tarde y no había nada que hacer; el joven ya no tenía signos vitales y personal del centro médico confirmó su deceso.
“Muy triste que eso pase, que dos pelados que tiene la vida y las oportunidades para hacer las cosas bien terminen en estas. Últimamente por acá se presentan muchas peleas, la gente es muy intolerante y una vaina que puede solucionarse civilizadamente crece y crece hasta terminar en este tipo de tragedias. Ambas familias quedan destruidas por algo totalmente evitable. Más que policía, en este barrio necesitamos educación, mientras la gente siga pensando así nada va a cambiar”, nos contó una compungida vecina del barrio Brasilia quien se enteró del suceso de casualidad mientras este medio realizaba labores de reportería en la zona.
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