El año pasado la administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud (Adres) giró recursos para el régimen contributivo por el orden de los $18,79 billones, mientras que entre enero y septiembre del 2021 lo ha hecho por $21,20 billones, lo que significa un incremento del 13,0% en comparación con el año pasado.
El caso se repite en el régimen subsidiado. El año pasado los giros fueron por $18,44 billones y en 2021 están en los $19,40 billones, lo que significa un incremento del 5,21%.
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En el caso del giro directo a IPS y proveedores del total de recursos por concepto de la Unidad de Pago por Capitación (UPC) que es el valor anual que se reconoce por cada uno de los afiliados al sistema general de seguridad social en salud, 40% se hicieron a 2.800 clínicas, hospitales y demás proveedores. Y 60% fueron para el régimen subsidiado.
Jorge Enrique Gutiérrez Sampedro, el director de la Administradora, explicó que con el giro de recursos se logró garantizar que las personas tuvieran acceso a los servicios.
“Entre los retos más grandes que teníamos en el financiamiento de servicios de salud, por diferentes mecanismos logramos que los ciudadanos tuvieran una cobertura en la pandemia y garantizamos con mecanismos de liquidación y compensación que los afiliados en los dos regímenes fueran atendidos en sus contingencias, incluso con los mecanismos que destinó el Gobierno”, explicó Gutiérrez.
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El directivo enfatizó que en el régimen contributivo la mayoría de los recursos se da por las cotizaciones de salud y un financiamiento que se comparte con el Estado, mientras que en el caso del subsidiado son recursos que provienen de diferentes fuentes que se reconocen por cada ciudadano.
“En la pandemia debíamos cubrir el problema de salud y también el de las pérdidas de empleo. Se diseñó un mecanismo para que se siguieran haciendo los pagos de las personas que perdían el empleo y que fueran atendidas por las EPS o las IPS, según fuera el caso, y el sistema no dejó de estar financiado. Así surgió el giro directo de los recursos de salud y dimos 65% a los hospitales y 40%en el caso de los contributivo”, agregó.
Se busca que esos recursos lleguen directamente a las IPS y no pasen por las EPS, así se busca apoyar a los hospitales públicos.
En el caso de los montos adicionales fueron de más de 3,8 billones de pesos, “esto quiere decir que hubo una inyección del 10% adicional por la pandemia para todo el sistema de salud.
En cuanto a los activos por emergencia Covid-19, que estuvo dirigido a las personas que estaban pagando una EPS y perdieron los ingresos o la capacidad de pago, se les destinaron $1,31 billones desde la declaratoria de emergencia hasta noviembre de este año”, declaró el directivo.
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De agosto a diciembre de 2020 por este caso se reconocieron $218.019 millones por 74.008 afiliados promedio mensual y en lo que va del 2021 se reconocieron $1,09 billones por 1.664.351 afiliados promedio mensual. “En el caso de los hospitales y clínicas de junio a diciembre de 2020 se pagaron 463.490 millones por 2.436 solicitudes de anticipo para cumplir con en las capacidades de UCI en 388 clínicas y hospitales”, dijo.
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