El fiscal general de la Nación no tiene ninguna facultad para usar contratistas pagadas con dineros públicos como servidoras de su familia
En documentos oficiales de la Fiscalía General de la Nación dos empleadas de servicios generales de la empresa UT SOLOASEO- EMINSER aparecen asignadas a la “Casa” del fiscal general Francisco Barbosa.
Estas trabajadoras son remuneradas por la compañía que a su vez, ha tenido contratos con el ente investigador, entre ellos, uno por más de 6.300 millones de pesos. Por lo anterior, Francisco Barbosa no tiene ninguna facultad para usar contratistas pagadas con dineros públicos como servidoras de su familia.
De acuerdo con el portal Cambio, que consultó a cuatro exfiscales generales de la nación, cada uno de ellos coincidieron en que es una situación que no se había presentado en administraciones pasadas. Incluso uno de ellos indicó que, el uso de contratistas pagados por la Fiscalía para labores domésticas podría tipificar el delito de peculado.
Según información del medio mencionado la jefe del Departamento de Construcciones y Sedes de la Fiscalía, Sandra Méndez aseguró que: “la prestación del servicio de aseo y cafetería no incluyen en ningún caso la prestación del servicio en la residencia del señor fiscal general de la nación y por tanto, esta supervisión no ha autorizado ningún pago con recursos públicos con este concepto”, en respuesta a un correo electrónico.
De igual manera, la comunicación añadió que las trabajadoras de aseo y cafetería “no tienen ningún vínculo contractual con la Fiscalía General de la Nación”. Y que con lo anterior, las operarias al parecer, decidieron trabajar por su cuenta y que el ente investigador “no tiene conocimiento de las actividades o servicios que las mismas puedan realizar en su tiempo libre en el ejercicio de la autonomía de su voluntad”.
Por su parte, Cambio conoció un documento que prueba al menos a dos de las trabajadoras domésticas en su asignación a la casa fiscal general, el cual se titula “Personal del despacho 2022″. Allí se hace un listado de los funcionarios y contratistas asignados a la oficina del fiscal Barbosa.
Dentro del capítulo de cafetería se encuentran ocho personas. Entre ellas, dos cuya ubicación laboral es “casa”; se identificaron como Dora Priscila Muñoz Parra, con cargo de operaria, y Sara Inés Segura Ortega, con el de operaria de aseo y cafetería.
Además, fuentes consultadas por el mismo medio, aseguraron que las empleadas de la compañía contratista de servicios generales trabajaban cotidianamente en la residencia privada de Francisco Barbosa, supuestamente vistiendo un uniforme azul de la empresa.
Por otro lado, estas mujeres quienes han desempeñado labores domésticas se han quejado ante el número de horas que tiene que trabajar. Y es que los encargados de los vehículos de seguridad han confirmado que deben hacer unos recorridos muy largos para buscar a cada una de las empleadas del servicio en barrios apartados.
Para finalizar, un funcionario que ha trabajado con el fiscal Francisco Barbosa, se sorprendió cuando que las empleadas dela empresa UT SOLOASEO- EMINSER fue asignada a las labores domésticas: “Nos quedamos estupefactos cuando un día nos informaron que estas dos niñas iban para la casa de él. Pensamos que iba a ser por una semana, pero no, era de tiempo completo. Eso desde que llegó, la misma semana, fue diciendo y haciendo. Inicialmente eran tres, luego quedaron dos porque a una la alternaban”, reveló para el portal mencionado.
Otro de los trabajadores de la casa fiscal, quien decidió proteger su identidad, aseguró que algunos de ellos sienten como desconsiderado y sin límites de horario. “El fiscal de pronto amanecía mal con la esposa, se iba para el búnker y nos hacía ir a todos y él se ponía a trotar en el cuarto seguro o a leer. No teníamos vida familiar”.
Con respecto a la Fiscalía, este domingo en respuesta a esta denuncia del portal de noticias Cambio, emitió un comunicado en el que desmiente la información sobre la situación.