CONTINUARÁN CON EL PROCESO DE RESOCIALIZACIÓN
Tres mujeres y cuatro hombres, condenados por diferentes delitos, lograron obtener el título de bachiller a través del programa educativo del Colegio Nuestra Señora de las Mercedes, que funciona en la Cárcel Judicial de Valledupar.
Para garantizar su reinserción en la sociedad, una vez cumplida su condena, siete reclusos de la Cárcel Judicial de Valledupar recibieron el título de bachiller, a través del Colegio Nuestra Señora de las Mercedes que funciona dentro del recinto penitenciario para atender en educación a más de 300 privados de la libertad que se preparan en los grados de primaria y bachillerato.
Una ceremonia, en la que asistieron sus familiares, autoridades y el cuerpo de docentes que los guiaron, se realizó ayer en la cárcel dando ejemplo de superación por parte de tres mujeres y cuatro hombres, quienes decidieron darse una oportunidad en medio de un proceso que buscan superar.
Los siete nuevos bachilleres cumplen una condena, tiempo en el cual aprovecharon para obtener el anhelado diploma.
Enilda Vásquez, directora de este centro penitenciario, explicó que una vez recibida la resolución de la Secretaría de Educación Municipal, se logra este objetivo. El colegio tiene varios años funcionando en la cárcel y esta es la quinta promoción de bachilleres que se logra.
Reiteró que el Colegio Nuestra Señora de las Mercedes, cuenta con todas las herramientas académicas y tecnológicas para quienes deseen hacer parte de este programa de estudio que funciona en horarios matutino y vespertino. Los aspirantes, incluso presentan las pruebas Icfes, con la misión de acceder a la educación superior una vez salgan de cumplir su condena.
Omar Alonso Arévalo, rector del Colegio Nuestra Señora de las Mercedes, son estudiantes que han alcanzado el logro de culminar y continuar con su proceso de educación. “Tenemos algunos que han logrado terminar el bachillerato y han continuado con sus estudios universitarios, con el apoyo de la Universidad Nacional Abierta, Unad”.
Los docentes son vinculados por la Secretaría de Educación Municipal y la dotación escolar está en manos del Inpec. Alrededor de 300 reclusos se benefician con este programa educativo que busca la resocialización de los privados de la libertad.
Fue un emotivo acto, al que asistieron familiares, autoridades y docentes que hicieron parte de este proceso de enseñanza.
Los privados de la libertad cumplieron los estudios de bachillerato por ciclos, y podrán seguir con los estudios universitarios.
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