Por primera vez en varios meses, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, no votó en la junta directiva por bajar en 100 puntos básicos (pb) la tasa de interés de política monetaria del Banco de la República, que este viernes la llevó del 11,75 % al 11,25 %.
El Ministro dijo que quería generar un consenso en la mayoría de la junta con la propuesta de bajar en 75 pb la tasa, pero al final la junta, a excepción del codirector Jaime Jaramillo, quien no asistió a la reunión, decidió por una disminución de 50 pb.
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Leonardo Villar, gerente del banco central colombiano, dijo que la inflación anual en mayo se mantuvo inalterada en 7,2%, mientras que la inflación anual sin alimentos ni regulados se redujo de 6,4% a 6,1%. La inflación anual de alimentos superó lo previsto al aumentar de 3% a 4,4%.
Aseguró que la encuesta de analistas económicos realizada en junio por el Banco de la República arrojó en la mediana de la muestra un descenso de 4,6% a 4,3% de la expectativa de inflación a un año con respecto a la medición de mayo, y estabilidad en 3,8% para la inflación esperada a fin de 2025.
“Las expectativas de inflación obtenidas del mercado de deuda pública permanecieron relativamente estables, y si bien apuntan a una trayectoria descendente en el tiempo, permanecen por encima de la meta hasta finales de 2025”, aseguró Villar.
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Luego de registrarse un crecimiento del PIB de 0,9% en el primer trimestre, que superó las estimaciones del equipo técnico del Banco (0,3 %), “los indicadores para el segundo trimestre sugieren que la economía habría continuado su trayectoria de recuperación”, dijo el gerente general.
Indicó que las primas de riesgo para el país y la tasa de cambio del peso frente al dólar se han incrementado, en un contexto en el que las condiciones financieras internacionales permanecen restrictivas.
Villar dijo que la política monetaria mantiene una postura acorde con el objetivo de conducir la inflación a su meta a mediados de 2025, al tiempo que ofrece un nuevo impulso a la recuperación del crecimiento económico.
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, aseveró que hay compromiso de todos los miembros de la junta directiva del Emisor de seguir bajando la tasa, aunque advirtió en que hubo desacuerdo entre hacerlo en 50 pb y 75 pb para acercar la tasa de intervención a la de inflación.
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Eso sí, aclaró que en esta oportunidad la tasa es menos restrictiva que en el pasado y la tasa real bajó en 50 puntos.
Bonilla recalcó así mismo que se observa una senda del crecimiento que hace que se pronostique un incremento del PIB de 1,7 % este año.
De todas maneras, dijo que hay un tema internacional que se debe tener en cuenta, pues hay condiciones internacionales restrictivas que más que las guerras o conflictos, es la decisión de la Fed (banco central de Estados Unidos) de no bajar por el momento su tasa, lo que tiene efectos sobre la tasa de cambio y que en menos de un mes registró un fuerte crecimiento por este tipo de situaciones internacionales.
Por su parte, Villar aseguró que en la pasada junta directiva de abril se revisó al alza la proyección de crecimiento al 1,4 % “y una nueva estimación del equipo técnico del banco se dará a conocer en la próxima junta de julio”.
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“La información recibida es positiva, lo que muestra una economía en recuperación y con una senda al alza”, comentó Villar.
Advirtió que en este momento lo que “sí importa son las condiciones financieras internacionales que han estado relativamente tensionadas por la incertidumbre de la inflación y tasas en Estados Unidos y eso genera que el dólar se haya fortalecido frente a las monedas del mundo y por eso la depreciación del peso en las ultimas semanas, por eso se tomó la decisión de bajar 50 pb pues la mayoría dijo que una reducción más fuerte podría ser riesgosa”.
Enfatizó en que hay consenso en los miembros de la junta de tener tasas más bajas que la actual, pero para tenerlas hay que ver que la inflación converja a la meta. Reveló que la tasa actual (11,25 %) es contraccionista “pues estamos en reducción de la inflación que nos está permitiendo bajar la tasa real, y con la inflación de 7,2% es de 4,1 puntos porcentuales. Es mayor a lo que se considera neutral y consideramos que a futuro va a seguir bajando en cuanto la convergencia de la inflación a la meta se vaya consolidando”.
También dijo que si bien es una tasa es alta, es menor a la de países como Brasil donde es de 7,2 puntos o México que la tiene en 6,3 puntos, pero comentó que Chile y Perú ya controlaron la inflación y por lo tanto la tasa neutral es más baja que la colombiana.
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Para el gerente del banco central colombiano, la senda futura de la tasa dependerá de la información disponible en el momento y advirtió que “se podría cambiar el ritmo en cualquier momento. Tenemos cuidado de no condicionarnos con lo que vamos a hacer en el futuro, pero la cautela de ir a la baja es precisamente que ese proceso se haga suave, sin contratiempos y sin necesidad de reversiones”.
Dijo que los incrementos en el precio del dólar no implican una intervención.
El Ministro de Hacienda hace cuentas con la tasa
Ricardo Bonilla dijo que el consenso del mercado es que la tasa del Banco de la República cerrará el año en 8,5 % y con el nivel actual de 11,25 % y a falta de cuatro sesiones en las que se puede tomar decisiones, en algún momento la disminución será superior a 50 puntos básicos.
Recordó que la reciente decisión de la calificadora de riesgo Moody’s, de poner perspectiva negativa, pero ratificar la calificación de riesgo, muestra los esfuerzos que se están realizando en materia ajuste fiscal y de presupuesto. Señaló igualmente que siempre hay riesgos y se mantienen los de corto plazo, como los posibles efectos del fenómeno de La Niña, que ya ha generado algunas inundaciones, por lo que hay que ver cómo se afectan las cosechas.
HOLMAN RODRÍGUEZ MARTÍNEZ
Periodista de Portafolio