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Tejiendo Huellas es el negocio de María Fernanda Olaya, quien con hilos y agujas teje procesos de “emprendimiento, salud mental y empoderamiento”.
información Cali.
En Tejiendo Huellas, tejer funciona como terapia, como oportunidad de emprendimiento y como opción para un nuevo comienzo.
María Fernanda trabaja con diferentes grupos de población: madres cabeza de familia, jóvenes y en general “hombres y mujeres que buscan una alternativa para salir de la rutina”.
Por si acaso, tejer no es solo cosa de mujeres.
Dice que ha trabajado en diferentes municipios del Valle del Cauca, en Dagua, Tuluá, Cerrito, La Cumbre entre otros, aportando su artesanía y todo su talento.
Todo para que las personas se formen y puedan crear nuevas fuentes de ingresos gracias a las técnicas y oficios que ella enseña.
Aunado a esto, María Fernanda señala que Tejiendo Huellas trabaja para salvar los valores de los habitantes del Valle del Cauca.
“Creo que los humanos hemos venido a ser felices y a servir”. se dice.
Y también para dejar una huella positiva en las personas que te encuentras en el camino. Esta es la convicción de vida de esta mujer que dedica sus días a tejer huellas positivas en la vida de sus allegados.
Talleres de tejido de huellas
“Quiero invitarte al taller para que tomes un curso de crochet, lana, macramé, cerámica, pintura y muñecos navideños.
El aporte que se ha hecho a las personas pospandemia ha sido muy poderoso, muchos se han quedado atrás, deprimidos, enfermos y en Tejiendo Huellas ofrecemos un respiro.
Nosotros “ayudamos incluso con enfermedades como: Alzheimer, demencia senil”. También es entretenido, y sobre todo en Crochet, «aprendes a ver quién eres tú mismo».
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Estas son historias de periodismo ciudadano de tubarco y apoyado por Valle del Compromiso.
