Javier Guerrero Barón, director del Doctorado en Historia de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia y quien hace parte de la Comisión Asesora Para la Enseñanza de la Historia del Ministerio de Educación, asegura que, ”el 20 de julio de 1810 es una fecha muy importante, una historia conectada con muchas regiones del país, pero especialmente con la provincia de Tunja”.
Ese día fue el estallido de una revolución conspirativa de los revolucionarios de entonces, es el resultado de un proceso que se conoce como el juntismo. Recuerda el profesor que todo estalló por un descontento popular, “fue por el impuesto a las ventas de hoy que se desató la revolución, el malestar que reinaba en todas las provincias, reventó ese día”.
“El juntismo de 1808 se da por la captura de la familia real de España por parte de Napoleón Bonaparte, esas juntas de regencia se instauran en todos los virreinatos como seccionales de las juntas de regencia de España y entonces se va produciendo un proceso de calentamiento de esas revoluciones que están en ciernes”, asegura.
Para el historiador “lo más importante del 20 de julio de 1810, es el 9 de diciembre de 1811 con la Constitución de la Primera República”.
“Es el antecedente más importante de la constitución de la primera república de América Latina, la república de las provincias unidas de Tunja que se enfrenta al centralismo de Cundinamarca que es importante, pero eso provoca que muchos se vayan para Villa de Leyva a hacer una constitución republicana que es proclamada el 9 de diciembre de 1811”, recuerda el director del Doctorad de Historia de la UPTC.
El 20 de julio de 1810 se trató de “una pelea planeada el día de mercado, en la que había un orador, un agitador y el papel que jugaron las mujeres fue muy importante”.
Los intelectuales arman la pelea para que se alboroten en la plaza de mercado para llegar a pedir Cabildo Abierto con el cual el pueblo le hace unas peticiones al Gobierno, un pueblo cansado de la desigualdad y de la imposición de todo tipo de impuestos.
Para el profesor Javier Guerrero “la república latinoamericana es inventada y sus laboratorios principales fueron Tunja y Villa de Leyva”.
Recuerda que, “el 20 de julio está conectado por José Joaquín Camacho que es el vocero de esas élites ilustradas de la provincia de Tuna que están pensando en una constitución que reemplace al rey, lo que fracasa en Cundinamarca con la Constitución de abril de 1811 se cristaliza para bien del proceso republicano, en la Constitución redactada en Villa de Leyva que va a florecer el 9 de diciembre de 1811 en la proclamación del Cabildo Abierto se declara capital de la República de las Provincias Unidas”.
Para la profesora Nubia Elena Pineda de Cuadros, directora de la Escuela de Ciencias Humanísticas y Educación de la Facultad de Estudios a Distancia de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia y quien también es doctora en Historia, “ese 20 de julio era un viernes, día de mercado en Tunja en ese momento ya se habían dado algunos elementos para pedir la independencia”.
Ella destaca los logros ciudadanos que incluía la Constitución redactada en Boyacá, “nos da a conocer la primera tridivision del poder, el sistema federal de Gobierno, el debido proceso, control de constitucionalidad, regla fiscal, tributaria y presupuestal, categoría de ciudadano para los mayores de 15 años, el abandono al súbdito o vasallo de rey, ya no se quería hablar en esos términos, también para la escogencia de sus propios gobernantes surge el voto y las elecciones periódicas”.
