Este será el destino de Luna tras ser rescatada de condiciones desfavorables.
Noticias Bogotá.
El reciente caso de Luna, una llama utilizada para trabajos ambulantes en el centro de Bogotá, ha encendido las alarmas sobre la explotación de animales no domésticos en entornos urbanos.
El episodio, que generó indignación y debate en redes sociales, también puso de relieve las lagunas en la protección y el bienestar animal en la capital colombiana.
Ahora, con el animal bajo custodia preventiva, surgen muchas preguntas sobre su futuro y el papel de las autoridades en casos similares.
El rescate y evaluación de Luna
El desplome de Luna ocurrió en pleno centro de Bogotá, específicamente en la calle séptima con carrera quinta.
Según Mariana Martín Leyes, directora del Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA), las autoridades actuaron rápidamente tras la circulación de imágenes en redes sociales que mostraban a la llama en un estado preocupante.
“Se hicieron virales unas fotos de la llama desplomada en el centro, y el Instituto inició una investigación para determinar si estaba viva o muerta”, explicó Martín Leyes.
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Afortunadamente, Luna fue encontrada con vida, pero las evaluaciones iniciales revelaron que estaba en condiciones desfavorables, lo que llevó a su aprehensión preventiva junto con otra llama que la acompañaba.
Ambas se encuentran actualmente bajo observación y tratamiento médico por parte de especialistas del IDPYBA.
Un problema que persiste
El caso de Luna no es aislado. La explotación de animales en zonas urbanas es un fenómeno recurrente en Bogotá, donde animales como llamas, caballos y burros son utilizados para trabajos forzados o como atractivos turísticos.
Estas prácticas, además de representar una forma de maltrato animal, también contravienen las normativas distritales que buscan proteger a los animales de la explotación y el abuso.
Según expertos, la presencia de estos animales en ambientes urbanos puede provocarles estrés extremo, desnutrición y enfermedades derivadas de las condiciones en las que son mantenidos.
¿Qué sigue para Luna?
Tras su rescate, Luna se encuentra en un proceso de rehabilitación que incluye atención veterinaria y evaluaciones constantes para garantizar su recuperación.
El IDPYBA ha indicado que, dependiendo de su estado de salud y adaptabilidad, se explorarán dos opciones principales: su traslado a un santuario especializado o su reubicación en un entorno natural donde pueda vivir sin el riesgo de ser explotada nuevamente.
¡Luna está viva!🦙✨
Luego de denuncia del caso de la llama Luna, en operativo interinstitucional y tras valoración por el Escuadrón Anticrueldad y Equipo de Granja, se emitió concepto desfavorable y se realizó la aprehensión material de Luna y Princesa por parte de Policía.🧵 pic.twitter.com/0N5tUvV9tT
— Protección Animal Bogotá (@AnimalesBOG) December 27, 2024