¿Qué implica ser pobre o no? Esta pregunta toma fuerza en el marco del reporte Percepciones y bienestar subjetivo en Colombia: más allá de los indicadores tradicionales que presentó el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud).
(Lea: Así es como están percibiendo los colombianos su nivel de pobreza).
En este se concluyó que las percepciones que tienen los ciudadanos en relación con la pobreza y la desigualdad contribuyen a la persistencia de estas, y que además, difiere de los indicadores objetivos.
Según el reporte del Pnud, el 30% de las personas en condición de pobreza extrema, y 31% de los pobres, no consideran que sean pobres, es decir, tres de cada diez. En cambio, el 24% de la clase media sí se considera pobre, así como 6% de la clase alta. “La percepción de la gente se aleja un poco de la realidad”, explicó María Angélica Arbeláez, directora del informe.
De acuerdo con la experta, hay también una brecha entre la posición social en la creen que están las personas, y donde están realmente.
“Al analizar por quintiles de ingreso vemos que en el quintil 1, donde se ubica la gente más pobre, las personas creen que son menos pobres de lo que son, mientras que en el quintil 5 la gente se cree menos rica de lo que es, y todos se van hacia las posiciones medias de la distribución del ingreso”, explicó Arbeláez.
De acuerdo con la vocera del Pnud, además, al mirar los criterios de clasificación del Dane para las clases sociales, la mayoría de quienes integran la clase media en Colombia se ubican en el último quintil de ingreso, es decir, en el 20% más rico de la población.
(Vea: Por qué el desempleo en enero en el país fue de 13,7 %).
El reporte del Pnud evidenció además algunas de las preocupaciones que hay en Colombia, especialmente frente a los niveles de desigualdad, ingresos y oportunidades.
Para 81% de los encuestados la distribución de los ingresos en el país es injusta o muy injusta, mientras que 74% expresa la misma percepción frente al acceso a la salud. En el caso del acceso a la educación, para 65% no es justo, y en relación con la justicia, 83% la percibe como injusto, o muy injusto, el acceso a la justicia en Colombia.
El reporte detalla también que las personas con mayor educación, que se perciben en las posiciones más altas de ingreso y que experimentaron movilidad social, muestran menores niveles de preocupación frente a la desigualdad.
Además, según el Pnud, la confianza “está en el centro del circulo vicioso entre altas desigualdades y baja productividad”, pues en el país se presentan niveles de confianza muy bajos, tanto en las instituciones como en otras personas.
Frente a todo esto, Sara Ferrer Olivella, la representante residente del Pnud para Colombia aseguró que si el país quiere generar riqueza y superar la pobreza “es prioritario entender las percepciones de los ciudadanos: cómo se sienten, en qué creen y confían, y qué perciben que está afectando a su entorno, sus expectativas y su toma de decisiones”.
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De acuerdo con Ferrer, los elementos que ofrece el informe pueden contribuir al análisis y diseño de políticas públicas para disminuir la pobreza y la desigualdad.
LAURA LUCÍA BECERRA ELEJALDE
Periodista de Portafolio
