El cierre en la Vía Panamericana completa cinco días después del derrumbe presentado en el kilómetro 75 que ha dejado al departamento de Nariño alejado del resto de la Nación.
(Lea: ‘Antes de un mes no habrá paso por la Vía Panamericana’: Petro).
Esta afectación en la vía que conecta desde Ecuador hasta el centro del país, no solo ha afectado al departamento, sino que ha congelado las actividades de comercio exterior tanto de exportación como de importación y ha dejado represado a más de 6.000 camiones de carga con mercancía.
Con esta eventualidad, la cartera de Transporte ha determinado como ruta alterna la vía Pasto – Mocoa – Popayán para seguir llevando productos de primera necesidad y abastecer a toda la región. Sin embargo, el transportar mediante ‘el trampolín de la muerte’ como lo denomina Fedetrascarga, trae consigo impactos a la economía como los sobrecostos. Además, la Federación alega que esta ruta es ‘insegura’ y no cuenta con la capacidad para vehículos articulados (tractomulas).
“Los fletes previos a la emergencia para vehículos rígidos de dos ejes, con capacidad de carga de máximo 10 toneladas de Bogotá a Pasto estaban determinados en un promedio de $2’300.000 en la ruta por Mocoa, hoy esta misma ruta tiene un costo en flete de $4’000.000, de igual manera la ruta Ipiales – Cali para la misma configuración vehicular previo a la emergencia tenía un flete de $1´200.000, hoy se están pagando hasta $5’300.000”, señala la Federación.
(Vea: Lupa a aerolíneas por los altos precios desde y hacia Pasto).
Con toda esta situación, el sector de transporte de carga se encuentra en una encrucijada, y según Henry Cárdenas, presidente del gremio estima que al día el sector está perdiendo cerca de $20.000 millones en fletes en esta zona.
¿Cómo estarán los precios?
Estos impactos en el bolsillo de los transportadores han repercutido inminentemente en el precio final de los productos, y esto sumado a la inflación, se está convirtiendo en una fórmula de incertidumbre en los hogares nariñenses.
Según José Stalin Rojas, director Observatorio de Logística y Movilidad de la Universidad Nacional “se deterioraron las cadenas del sector lácteo, de los productos agropecuarios que consumían los hogares de la zonas del sur occidente de Colombia (Cauca-Nariño) (…) al interrumpirse el flujo de mercancías, se exploran vías alternas que son más demoradas y más costosas, lo que provoca un encarecimiento de los productos del agro”, señala.
Vale recordar que en esta arteria vial se moviliza una gran cantidad productos de primera necesidad para la región. En el periodo de enero a noviembre de 2022, por la zona se movilizó 1,62 millones de toneladas de maíz, 2,38 millones de toneladas de azúcar, 2 millones de toneladas de trigo, 1,60 millones de galones de gasóleo, 814.357 de galones de aceite de soya y 1,91 millones de galones de combustible. Además, diariamente se movilizan 364.000 litros de leche, según Fedetrascarga, con base en reportes de la RNDC.
(Siga leyendo: Son más de 900 los damnificados por derrumbe en suroccidente del país).
A la fecha el Ministerio de Transporte y los gremios trabajan para reactivar el transito de carga, por ello, evalúan la ruta de Buenaventura-Tumaco para la movilización de mercancías.
PAULA GALEANO BALAGUERA
