En el barrio El Recreo, de la localidad de Bosa, varios sujetos acabaron con golpes y puñal a un joven de
“A mí me despertó la alarma y los gritos de varias personas en la calle. Serían por ahí las 2 de la mañana cuando eso ocurrió. Lo que pasó todavía no se sabe muy bien, porque como en estos casos la gente siempre tiene mil versiones uno no sabe qué pensar, pero lo que yo vi fue a un muchacho que estaba tirado en el suelo malherido con varias personas alrededor que lo estaban socorriendo”, dijo una vecina del barrio El Recreo, en la localidad de Bosa, donde la madrugada de este sábado, pasadas las 2:00 a.m., un joven de 28 años sufrió un cruento ataque a puñal que le costó la vida.
“Había una muchacha, tal vez la pareja del sujeto que atacaron, que gritaba de una manera tan dolorosa, que luego no pude ni dormir; ¡me quedó eso en la mente!”, añadió la vecina de una zona residencial del sector donde se presentó el crimen.
Los hechos que acabaron con Víctor en Bosa
El ataque se dio en un tradicional sector residencial del barrio El Recreo, en inmediaciones de la Carrera 103 con Calle 74 Sur. Las versiones son disímiles.
Por un lado se dice que el joven fallecido, a quien las autoridades identificaron como Víctor Alejandro Ramírez, pasaba por el sector momentos después de salir de su vivienda, al parecer, para comprar licor, ya que se encontraba departiendo con varias personas y habría sido en ese corto recorrido donde se habría encontrado al grupo de personas con el que resultó enfrentado.
Otra versión sostiene que Ramírez se encontraba en el punto donde fue atacado en compañía de varias personas, momentos después de que salieran de una reunión en la que todos se encontraban departiendo. En ese momento, cuando se encontraron con otro grupo de personas fue cuando se habría desatado la riña que derivó en el crimen.
A pesar de las versiones encontradas, los testigos coinciden en que el joven fue atacado en gavilla, al menos, por cuatro sujetos que se le fueron encima y en cuestión de segundos lo dejaron debatiéndose entre la vida y la muerte.
“Al muchacho lo atacaron como entre 4, 5 o más. Le pegaron golpes y puñaladas, y el chico alcanzó a caminar por ahí unos 20 pasos antes de que se cayera y quedara ahí, en el lugar donde lo recogieron para llevarlo al hospital. Incluso, alguien que vio quién fue el que lo apuñaló se le fue detrás, pero no lo pudo alcanzar”, nos dijo una vecina que vio la escena desde la ventana de su habitación.
Mientras unas personas trataban de cazar los responsables, otros daban inmediato aviso a las autoridades. Eternos minutos después de ser atacado, Víctor fue trasladado al Hospital de Bosa con la esperanza de salvarle la vida, luego de recibir la mortal herida a la altura de su pecho, pero lamentablemente a su llegada al centro asistencial los médicos confirmaron que ya no registraba signos vitales.
En la mañana de ayer varios vecinos y allegados de la víctima hicieron presencia en el lugar del ataque para rastrear las cámaras de seguridad y testimonios que los lleven a esclarecer este nuevo homicidio motivado por la consabida intolerancia que nos define como sociedad y por la incapacidad de resolver conflictos por vías alternas a las violentas.
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