En un caos se ha convertido la plaza principal del barrio Primero de Mayo, en Valledupar, principalmente en horas de la noche, por la constante presencia de pandilleros que se han dedicado a causar destrozos al área de recreación, principalmente en el parque biosaludable, cuyas piezas luego intentaron negociar a 2 mil pesos en un barrio aledaño.
Las bancas las han destrozado en su totalidad, el parque los de los niños por igual y ahora el más reciente fueron los aparatos biosaludables, cuyas piezas de hierro fueron picadas para extraerlas y negociarlas para el consumo de sustancias estupefacientes.
“En la noche la plaza es un caos, los vándalos se apoderan de los espacios causando miedo entre los transeúntes y habitantes del barrio. Son un grupo de jóvenes sin control que están causando daño a la comunidad y la policía no hace nada”, dijo un habitante de la zona.
Además de destrozar los parques, las lámparas las están dañando, le lanzan piedras todos los días para apagarlas y llevárselas, es una queja que se ha formulado al cuadrante de la policía y tampoco hacen nada.
El presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Primero de Mayo, Jorge Crespo, manifestó que la situación es preocupante porque dañan un patrimonio público cuyas inversiones son millonarias. “La Policía Nacional brilla por su ausencia, no conocemos al comandante del CAI y tampoco al de Valledupar para que escuche nuestras peticiones”.
Crespo aseguró que las quejas son formuladas a diario por los vecinos y comerciantes que están en los alrededores de la plaza, sin embargo, el grupo de vándalos sigue generando miedo con el objetivo de desmantelar el espacio público y dejarlo a oscuras para cometer sus fechorías.
“Solicitamos a la Policía Metropolitana de Valledupar que nos ayude a combatir este problema, que además merece atención para orientar a los jóvenes sobre los peligros del consumo de sustancias psicoactivas y la necesidad de preservar los espacios de recreación familia”, dijo el presidente de la JAC.
