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POR: NINOSKA REYES URDANETA
Desde el inicio de las fiestas decembrinas, la ciudad de Valledupar se ha visto repleta de turistas y visitantes. Sus potencialidades naturales, culturales y musicales han sido el centro de atención, demostrando una vez más su acertada denominación de la Unesco como ‘Ciudad Creativa de la Música’.
Sitios como el Balneario Hurtado, plaza Alfonso López, Parque de la Provincia, glorieta de Los Juglares y ríos como Badillo y Río Seco, fueron algunos de los lugares que se mantuvieron repletos de personas hasta este puente festivo de Reyes.
Lo preocupante de esta situación, que aunque trajo reactivación y movimiento de la economía en el municipio, fueron las aglomeraciones registradas en casa sitio turístico, principalmente en el río Guatapurí, Balneario Hurtado, donde el uso de las medidas de bioseguridad eran casi nulas.
Otro de los puntos críticos fueron los espacios donde se encuentran los monumentos en honor a los cantantes Diomedes Díaz y Martín Elías, donde las largas filas para tomar fotografías, daban cuenta del poco autocuidado por parte de los visitantes, quienes al parecer se olvidaron que el Covid-19 y su variante Ómicron siguen latentes y atacando con más fuerza, según los últimos reportes de salud.
VALLEDUPAR, LA CIUDAD MÁS LINDA
En el parque la Provincia se encontraba Olga Maestre, quien desde Bucaramanga llegó a la capital del Cesar con su familia para disfrutar de las zonas turísticas. “Definitivamente Valledupar es la ciudad más linda, tiene espacios llenos de cultura y tradición, además de su colorido y frondosos árboles que la hacen más atractiva”.
Eduardo Contreras López, visitante de Medellín, dijo que irse de la capital del vallenato sin tomarse fotos con las esculturas de los artistas, es como no venir. “Para mis hijos su sueño era tomarse fotos en los monumentos de Diomedes Díaz y Martín Elías, también bañarse en el río Guatapurí porque siempre lo han escuchado por redes sociales y por referencia de amigos”.
LAS VENTAS MEJORARON
José Vargas, vendedor en el Balneario Hurtado, dijo que en comparación a diciembre y enero pasado, la visita de turistas y las ventas se han duplicado, las cuales se espera se mantengan hasta el mes de febrero, como tradicionalmente ha sido.
“Esto es un boom para la economía, yo tengo más de 25 años trabajando en el área, y esta vez hemos vuelto a los buenos tiempos, superando los graves efectos que nos dejó la pandemia por el Covid-19”, afirmó.
Vargas aprovechó para exhortar a las autoridades a trabajar más en la formalización del turismo en el Balneario Hurtado, donde se requiere de inversiones para ofrecer mejores espacios y una infraestructura adecuada a la cantidad de turistas que visitan el área.
NECESITAMOS PARQUEADEROS
El regreso de los turistas en cantidades a Hurtado, dejó claro que la infraestructura de los parqueaderos no es suficiente para albergar a tantas personas y traer beneficios a los comerciantes y vendedores.
Así lo dejó claro Nacho Andrade, propietario de un estadero, quien reiteró que es cierto que las ventas se duplicaron, pero la falta de parqueaderos evitó que fuera mejor. “Desde la administración municipal pasada, trasladaron a los vendedores al área donde los restaurantes y estaderos utilizaban para el parqueo de los clientes, y hasta la fecha no hay alternativas”.
La denuncia también fue formulada por José Barrera, vicepresidente de la Asociación de Vendedores del Balneario Hurtado, quien aseguró que frente a los estaderos se forman un congestionamiento porque los clientes se parquean en toda la vía, incluso muchos prefieren no llegar por la seguridad de sus vehículos.
El parqueadero que por años utilizaban, alrededor de siete estaderos, está ubicado detrás del CAI de la policía lugar que hoy ocupan otros comerciantes, generando anarquía en el lugar.
Destacó que es cierto que las ventas han aumentado en 60% aproximadamente, pero también es una realidad el desorden que se está formando porque no hay mano dura por parte de las autoridades.
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