La industria textil que erigió las bases de la economía antioqueña el siglo pasado con empresas como Fabricato o Coltejer, ha tenido un giro de 180 grados. Hoy parece que el negocio para el departamento y el país no es producir y confeccionar sino aprovechar las marcas emergentes, o de culto, cuyas exportaciones son hasta 40 veces mayores en valor que las de grandes compañías tradicionales del sector.
Así lo expresó Sebastián Díez, presidente de Inexmoda, en una reciente entrevista…