Por: Pablo Gámez Sierra.
Cuando todavía los colonos agricultores del municipio de Barrancas no se reponen de las pérdidas dejadas por las lluvias que cayeron en la serranía del Perijá, durante el mes de mayo del presente año, los labriegos de esa región productiva volvieron a ser víctimas del invierno que se presentó el pasado fin de semana.
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En la temporada de lluvias pasadas se ocasionaron deslizamientos y una creciente súbita del río Palomino, que destruyó el acueducto del corregimiento de San Pedro y se llevó los cultivos, los animales, las cercas de las fincas y hatos ganaderos, en las veredas de Surimena, las Pavas, Monte el Agua, el Sierrón, así como de los distintos caseríos como Campo Florido, Arroyo Hondo, Sitionuevo, Corralito y Crucetal.
Las aguas lluvias desbordadas del afluente, trajeron consigo lodo y piedras, llevándose por delante todo lo que encontró a su paso. Esta vez los campesinos de Barrancas volvieron a ser golpeados por la fuerza de la naturaleza a pesar de estar advertidos por lo sucedido en los primeros días del mes de mayo.
Se estima que por lo menos cuatrocientas familias de esa zona productiva, quedaron damnificadas nuevamente porque el río Palomino se llevó lo que quedaba.
Por su parte, los productores del campo desesperados solicitan ayuda a la administración municipal de Barrancas y sostienen que el coordinador del comité de gestión de riesgos de desastres en el municipio, Yony Mendoza Zarate conjuntamente con la Defensa Civil y el cuerpo de Bomberos Voluntarios, realizaron una comisión de verificación.
Lo anterior con el propósito de hacer un análisis y evaluación de las necesidades, para determinar las afectaciones y los daños causados, y al mismo tiempo establecer los mecanismos de apoyo a estas familias afectadas; pero al parecer todo quedó en papelería.
Cabe resaltar, que desafortunadamente después de más de tres meses cuando nuevamente, se recrudece el invierno en la región, todavía no ha habido ninguna solución al problema por parte de la administración municipal de Barrancas o departamental, ni mucho menos una explicación convincente sobre porqué no llegan las ayudas que se canalizan a través del comité del riego de desastres coordinado en este municipio por el señor Yony Mendoza Zarate.
