Por Mariana Suárez Guarín
En la Universidad Tecnológica de Pereira se llevó a cabo el lanzamiento del laboratorio de Innovación Social Living Lab UTP, un espacio que más que un laboratorio físico es donde un equipo de personas comprometidas trabajan unidas con entrega y pasión, buscando aportar desde sus competencias a la solución de problemas y mejora de situaciones desde su territorio, para los efectos que traerá el cambio climático.
Erika Echeverri, docente UTP y líder del laboratorio Living Lab, revela detalles de este proyecto y el trabajo que se ha realizado. “Lo que hacemos en este laboratorio es facilitar espacios para que, entre docentes, investigadores y la comunidad en general podamos crear soluciones que nos permitan adaptarnos de manera más fácil a los efectos que va a tener el cambio climático en nuestro territorio. Mi labor particular dentro de este proyecto es ayudar a ese equipo de diseño a que recorra una ruta de innovación que consta de 5 pasos pasos, para lograr llegar a la construcción de una tecnología o innovación social”.
El proceso
“Básicamente lo que hacemos con la comunidad es identificar los problema o necesidades que tiene en su contexto real y con este equipo de diseño empezamos a buscar soluciones posibles a esta problemática. Cuando ya se tiene esa solución texteamos en nuestros laboratorios de la Universidad las posibles soluciones a ese problema para llegar a una solución que satisfaga la necesidad que tenemos y esa solución la ponemos en marcha en un contexto real más general para mejorarla y finalmente recoger todo ese conocimiento que generamos a lo largo de la ruta y poderlo escalar, ese es el gran objetivo, que la solución no solo se quede en un contexto particular del territorio sino que podamos escalar esta solución a otras comunidades que tengan problemas similares y a otros departamentos en el país”, manifestó la docente.
Líneas de acción
“Son cinco. La primera enfocada a la parte de sensibilización y formación porque identificamos la importancia de que los integrantes del territorio y ciudadanos del departamento comprendan los aspectos básicos en cuanto a cambio climático y perspectiva de género, que son las bases transversales de nuestro laboratorio, en este punto lo que buscamos es desarrollar competencias en los ciudadanos para que comprendan estas temáticas y empoderarlos para que sean ellos los que empiecen a identificar soluciones posibles a los problemas que se presentan referente a estos elementos. La segunda línea abarca todo lo que tiene que ver con género y cambio climático, porque necesitamos comprender cuales van a ser esos efectos del cambio climático para hombres y mujeres, es decir necesitamos determinar científicamente si en realidad en el departamento va a haber un impacto diferente y si es así, buscar las estrategias para proponer y lograr cerrar esas brechas de género que se puedan presentar en el territorio. La tercera línea es lo que tiene que ver con adaptación sostenible de las cadenas de valor, desde la facultad de Ciencias empresariales es un reto y compromiso ayudar a las organizaciones del territorio a estudiar sus cadenas de valor e identificar como las podemos adaptar de manera sostenible para que tengan un mejor impacto en la sociedad a nivel ambiental y la cuarta es la línea de la ciencia ciudadana que busca es construir conocimiento científico de la mano de los ciudadanos en cuanto a cambio climático y biodiversidad, donde se busca involucrar a las personas en las diferentes etapas de la construcción de conocimiento científico de investigación como los son la recolección de información y datos, el análisis de esos datos para crear preguntas de investigación, hipótesis, textearlas y poder compartir los resultados de estas investigaciones”, manifestó Erika Echeverri.
Prueba piloto
El reto de este nuevo laboratorio Living Lab, es generar adaptaciones de las cadenas de valor del café en Risaralda mediante prácticas sostenibles que fortalezcan las familias cafeteras, a través del empoderamiento de estas poblaciones, para hacer frente a fenómenos de cambios en el clima.
“Tenemos este proyecto piloto en el municipio de Mistrató donde contamos con la participación de diferentes asociaciones una es de Empalme generacional (grupo de jóvenes que retomaron el cultivo del café, teniendo en cuenta los conocimientos de sus padres y abuelos), que es una subdivisión de Aso Jardín (Asociación de cafeteros de Mistrató), también trabajamos de la mano con los chicos de campamentos juveniles para lograr identificar dentro de la cadena del café y los elementos que podemos entrar a abordar para mejorar este proceso. Actualmente estamos en una fase donde identificamos el problema, que es el manejo adecuado de los suelos, lo que sigue es determinar qué soluciones podemos plantear entre este equipo de diseño del proyecto Living Lab, para identificar la mejor manera de hacer un uso adecuado del suelo para poder que se dé un café de buena calidad y que responda a unos estándares internacionales y de sostenibilidad ambiental”, explicó Erika Echeverri.
El mensaje
Finalmente, la docente envío un mensaje para que la comunidad se integre a Living Lab UTP. “Este es el laboratorio del bosque modelo Risaralda, por esto se busca contar con la participación de todos los ciudadanos. “Los interesados en participar en este proyecto pueden dirigirse a la UTP a la Facultad de Ciencias Empresariales con un problema una necesidad, o algún elemento que quieran transformar en sus comunidades y nosotros en el laboratorio comenzamos a idear la manera de encontrar una solución”.
Por su parte Wilson Arenas, decano de Ciencias Empresariales UTP y coordinador del laboratorio Living Lab, manifestó que Living Lab es una propuesta que viene desde la Unión Europea, a través de un proyecto que la UTP presentó junto con otras universidades nacionales y latinoamericanas donde cada una de estas va a desarrollar un Living Lab alrededor del cambio climático su mitigación y adaptación. En este laboratorio se hacen reuniones con la comunidad y los expertos donde se realizan cuestionamientos como ¿qué creen que les está afectando el cambio climático a sus cultivos?, ¿cuáles son las problemáticas que sienten en su diario vivir? ¿Cuál es su problemática social, económica? y ¿Cuáles serían esos problemas para resolver?, luego estos se ponen sobre la mesa, y se comienzan a usar metodologías activas como talleres, juegos, fichas de lego, en un trabajo con los líderes de esas comunidades, luego de identificarlos, se priorizan y se va a gestar un proyecto para resolver ese problema, lo cual va a requerir financiamiento de orden nacional o internacional para resolver ese problema con la comunidad”.
Importante
“La Unión Europea apoyó este proyecto con recursos económicos para los desplazamientos a Mistrató, para el desarrollo de las actividades y algunos equipos que se han requerido, así como también la Facultad de Ciencias Empresariales de la UTP, ha financiado este proyecto y con el aporte de capital humano en donde participan alrededor de 15 docentes”, confesó el decano de la UTP.
Trabajo colaborativo
Una de las actividades productivas que más aportan al desarrollo económico del municipio de Mistrató, es el cultivo y la transformación del café, siendo este uno de los cultivos amenazados por los efectos del cambio climático; desde Living Lab UTP están trabajando con la comunidad mistratense en una prueba piloto, articulando los conocimientos científico y tradicional y la experiencia ciudadana para crear soluciones adaptativas que permita a las familias cafeteras afrontar los efectos del cambio climático. Uno mistratense relató su experiencia con este nuevo laboratorio.
Cristian Bueno, integrante del equipo Living Lab manifestó que: “Mi experiencia en este proyecto ha sido muy enriquecedora, ya que este le apuesta a la ciencia ciudadana y nosotros desde nuestro punto de vista hemos podido aportar en el tema de la sostenibilidad ambiental, y aprender de personas con alta capacidad técnica. El cambio climático es uno de los flagelos que nos afecta a nuestra economía que es la agricultura, para nosotros como jóvenes es muy importante empezar a implementar alternativas y técnicas para la mitigación del cambio climático y poder mejorar la productividad y sostenibilidad en nuestros procesos”.
