Con suma preocupación los habitantes del corregimiento de Carraipía y la vereda Garrapateros, ven como el ecoturismo peligra sin poder hacer nada luego que varios turistas han manifestado su preocupación por la manera cómo algunos habitantes de la zona turística, ubicados en el corredor de avistamiento de aves de los Montes de Oca les han venido haciendo costosas exigencias para dejarlos entrar al área de reserva.
Quienes viven en el corregimiento citado y la vereda en mención, creen y están convencidos que con ese comportamiento es imposible agradar al turista. Camilo González, un ciudadano que se mueve con mucha frecuencia entre Carraipía y la vereda Garrapatero, dice que esas exigencias de algunas personas que se mueven en moto en el área no son legales, y que eso no favorece la llegada de personas a ese sector turístico.
En diciembre pasado, según cuenta este habitante de la zona rural, una pareja de turistas fue retenida durante varias horas por sujetos que se movilizaban en moto, todo porque los veraneantes se negaban a pagarles 100 mil pesos por cada uno para dejarlos entrar a la zona de avistamiento de aves y el río Jordán en los míticos Montes de Oca. Finalmente, los dos turistas prefirieron regresar, pero no acatar las exigencias de los motorizados.
Desde hace mucho tiempo, turistas y habitantes de Carraipía y Garrapatero no entienden porqué las personas deben pagar para hacerse acompañar de vehículos y mototaxistas para poder llegar al río Jordán a bañarse y hacer ecoturismo.
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Para poder llegar hasta la sierra de Montes de Oca donde están los manantiales de la fuente hídrica y poder presenciar la multiplicidad de especies avícolas deben llegar a Carraipía, allí deben contratar a unas personas que se movilizan en vehículos y motos que conocen la zona, lo que les incrementa el costo del paseo.
Si no hacen este ejercicio, muchas personas están siendo despojadas de sus pertenencias en atracos cometidos por grupos que incluyen ciudadanos indígenas. Estos, en ocasiones, se asocian con alijunas y forman bandas armadas que cuentan con pistolas y armas largas.
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Los ciudadanos preocupados por el ecoturismo del área son partidarios de que ocasionalmente la fuerza pública programe y organice excursiones para proteger a los turistas interesados en conocer esta exótica zona de La Guajira, área además declarada protegida por la Corporación Autónoma de La Guajira, CorpoGuajira.
