El sindicato de servidores públicos de la salud, Sinserpusalud, ha alzado su voz para denunciar y rechazar enérgicamente los abusos, el acoso laboral y los despidos arbitrarios que se vienen presentando en la ESE Hospital de Turbaco, en lo que califican como una grave violación de los derechos laborales de sus trabajadores. La denuncia, hecha pública por la presidenta del sindicato, Mariana Marrugo Tarrá, resalta el incumplimiento de acuerdos pactados y la vulneración de derechos fundamentales dentro de la entidad.
Según la dirigente sindical, los trabajadores del Hospital de Turbaco enfrentan una serie de irregularidades que incluyen la acumulación de periodos vacacionales sin descanso, el incumplimiento del pacto colectivo registrado ante el Ministerio del Trabajo, la falta de dotación de uniformes, y lo más alarmante: el despido arbitrario de Karen Margarita Brines, bacterióloga del hospital, quien, pese a tener estabilidad laboral reforzada por fallos judiciales, fue desvinculada sin justificación legal.
«Desde que comenzamos como organización sindical en el Hospital de Turbaco hace más de un año, hemos actuado de manera conciliadora y respetuosa para proteger los derechos de los trabajadores. Sin embargo, los directivos de la entidad han persistido en un proceder arbitrario que nos obliga a denunciar estos abusos», expresó Mariana Marrugo, quien destacó que el despido de Brines es solo la punta del iceberg de una serie de irregularidades que afectan tanto a los empleados como a los usuarios del hospital.
Lo más grave, según la presidenta de Sinserpusalud, es que la denuncia de la bacterióloga sobre la falta de mantenimiento y de insumos en el laboratorio clínico, que conllevó al desecho de muestras sin procesar, fue ignorada por los directivos, y su acción de alertar sobre esta situación derivó en un constante acoso laboral. «Nuestra asociada denunció en reiteradas ocasiones la situación y, en lugar de tomar medidas correctivas, fue víctima de abuso de poder, acoso laboral y, finalmente, de un despido injustificado», enfatizó Marrugo.
Además de los despidos injustificados, los trabajadores del hospital enfrentan serias dificultades en el servicio del laboratorio clínico. Los pacientes son citados varias veces para repetir sus exámenes debido a la «falta de mantenimiento» de los equipos, lo que genera un riesgo para la salud de la comunidad y un evidente detrimento patrimonial para el hospital. «Es inaceptable que se juegue con la vida de los pacientes y que el hospital, en lugar de cumplir con su misión de servicio, esté siendo mal gestionado por la negligencia de sus directivos», denunció la sindicalista.
Ante esta situación, Sinserpusalud ha anunciado que acompañará a sus asociados en la lucha legal para que se restablezcan sus derechos laborales y se sancione a los responsables de estas irregularidades. La organización ha solicitado una intervención urgente de los organismos de control, la Liga de Usuarios, los directivos del hospital y el Control Interno, para que se frenen estos atropellos que afectan tanto a los trabajadores como a la comunidad cartagenera.
«Vamos a agotar todas las instancias legales para garantizar la justicia para nuestros asociados y para que no se sigan vulnerando los derechos laborales y humanos de quienes prestan un servicio esencial para la salud pública», concluyó Mariana Marrugo.